"Esposa" del Cordero | Cult of the Lamb

Cap 7: ¡No estoy haciendo un escándalo!

—Buenos días... ¿Estás en tu cabaña? —Narinder se despertó justo a tiempo antes de que llamaran afuera de su cabaña, seguido de tres golpes en su puerta. —¡Holaaa! ¿¡Hay alguien adentro!? ¡Si no hay nadie, supongo que puedo entrar a-!

—¡Ni se te ocurra entrar a mi maldita cabaña, lobato! —fue interrumpido por el gato de tres ojos, quien le respondió con voz molesta.

—¡Te dije que tengo dieciocho! ¡Prácticamente soy un adulto! —protestó Travis porque lo llamaron "cachorro".

—¡No me digas, es una gran sorpresa que mis palabras sean incorrectas para un supuesto adulto! —dijo Narinder con obvia burla en sus palabras, para replicar la evidente respuesta de Travis y al siguiente segundo, gritar: —¡Solo porque tengas dieciocho años, no significa que maduraste lo suficiente como adulto! ¡tus pensamientos estan muy por detras que un niño!

Travis quería refutar las palabras de Narinder, pero luego de reflexionar unos minutos en sus propios pensamientos... se dio cuenta de que no tenía ningún argumento válido para contradecir a nuestra querida felina, al menos no lo suficiente para protegerse con sus palabras... dándole mucho tiempo para que el gato se limpiara el resto de sus lágrimas y ordenara su cama. Saliendo de su cabaña con unas cuantas fresas en la mano.

—Narinder... ¿Por qué estás llevando unas fresas? ¿No deberías llevar las flo- —Siendo cortado por sus palabras, cuando le introdujeron unas frutas rojas en su boca, tosiendo mientras intentaba no atragantarse con las fresas, formándose lágrimas por sus ojos al intentar entrar aire a sus pulmones. — ¡cof!, ¡cof!... ¡¿Acaso quieres matarme?!

La respuesta del Gatito de tres ojos lo dejó sin palabras: —Lo haria, pero me sirves,además... solo pensé que tenías hambre viniendo a mi cabaña en plena madrugada... Poch chierto, ¿cuách era tu otcha preguncha? —preguntó mientras consumia una fresa en su boca, sin prestarle mucha atención a sus propias palabras mientras masticaba.

El lobito captó que el felino no se preocupaba de él cuando casi se atragantaba con las fresas, aun así le respondió a su pregunta después de que menciono un pequeña detalle de preocupación desinteresada por su parte: —Gracias por darme unas frutillas para calmar mi hambre, pero... la próxima vez extiéndeme tu mano para que agarre las frutas... ¿no deberías llevar las flores rojas en lugar de unas frutillas?

—Como sea, solo callate y quédate aquí... Saldré con esas ridiculas flores. —dijo para entrar nuevamente a su cabaña y salir con las flores de camelia en sus manos.

Narinder siguió al lobo a su paso, pero el camino le resultaba muy familiar mientras el sol comenzaba a llegar su luz en las demás cabañas... tan pronto como se detuvo Travis en el lugar, Narinder se dio cuenta de que solo lo había seguido para ir a su puesto de trabajo. Arrepintiéndose por haber contestado a los gritos del lobito, solo para mantener su orgullo y que no se le ocurriera entrar a su cabaña y viera sus lágrimas, un estado demasiado vulnerable. —Una emoción que no sentia cuando yo era el Dios de la muerte... olvide que tienen ese tipo de alteración los mortales. —Narinder no quería mostrar ninguna debilidad en su cuerpo mortal, pero de alguna manera siguio al lobito para apreciar las flores, incluso si eso significara trabajar...

—Estaré yendo por las herramientas de trabajo, puedes estar sacando hasta mientras el letrero en el cofre, no se te olvide sacar la hoja y la pluma para dibujar las flores que tienes en tus manos ¡no me tardo! —dijo Travis para correr inmediatamente en una dirección por las herramientas de trabajo, Narinder no le dio ninguna importacia hacia la dirreción donde se fue el lobo, porque se encontraba en sus pensamientos.