Los hombres del Valle 3 - El psicólogo y sus sub [+18 ] (SEVENTEEN)

Capítulo 7 - Joshua

Mi numerito para despedirme iba a tener consecuencia. Lo sabía y aun así no había podido ni querido evitarlo. Me había encantado mi noche con Seokmin, estaba deseando seguir con el plan para conquistar a Chan y no quería que hubiese secretos. Contaba con que me buscasen en algún momento del día, pero antes de eso iba a disfrutar de mis números o ese había sido el plan. Al recibir por parte de Jonah los archivos de contabilidad que Jeonghan seguía manteniendo en papel más la gran cantidad de facturas que aun no habían registrado y descubrir el lío que había en el ordenador, quise ahorcarle. Ahora entiendo su insistencia para que volviese cuanto antes. Era su forma de gritar auxilio. Me puse manos a la obra con ayuda de Jonah que tenía una mañana más tranquila salvo por las diversas interrupciones de sus hijos. Como me había explicado, el año que viene irían a la guardería y al colegio pues Chan y Jeonghan lo veían preparado. El sentía miedo, pero si iba a ser bueno que interactuase con otros niños... ya me había explicado seugcheol como había perdido a su marido de una forma brutal y que su hijo lo había visto todo. Eran una familia de supervivientes. "Como nosotros" pensé al recordar todo por lo que habíamos pasado mi hermano y yo. Debía dejar de verlo todo como un fracaso y considerar todo lo que había logrado después de regresar a la vida de la que había huido.

—Así que Chan...— Preguntó de pronto Jonah girando su silla para encararme—. Perdona, he aguantado lo que he podido para respetar tu intimidad, pero no puedo esperar más.

Me reí ante su necesidad de cotilleo, aunque no me hice de rogar y le expliqué como había ido la cita de anoche. Solo habíamos dormido juntos y nos habíamos besado, pero podía notar lo mucho que podía avanzar nuestra relación. No tardó mucho en mostrar su curiosidad por como íbamos a llevar nuestros kinks. Era una duda normal. Nuestros intereses era algo que no se podía apagar y si no se alineaba podía ser difícil. Me planteé darle largas, decirle que lo iríamos viendo sobre la marcha, pero necesitaba hablar con alguien. Necesitaba un amigo que pudiese escucharle, porque los otros sus de la casa querrían inmiscuirse. No había nada malo en que quisiesen que fuésemos felices, pero no quería que hubiese intermediarios. Si mi relación funcionaba, debía ser por nosotros mismos.

—No se lo digas a nadie. Seokmin y yo no queremos que se asuste, pero vamos a intentar que Chan se una a esto locura—. Al escucharme Jonah hizo una mueca y sus ojos se llenaron de compasión. Sabía algo que nosotros no—. ¿Qué es lo que sabes? Ahora tienes que contármelo.

—No es mi historia para cantar, pero chau prometió no volver a ser el daddy de nadie.

Se me calló el alma a los pies. Eso nos iba a complicar mucho la historia. Sabía, igual que lo había visto Seokmin, que estaba interesado en nosotros. Había cuidado de mí cuando lo había necesitado y salía gravitar hacía alguno de los dos desde que habíamos llegado, pero si algo en su vida le había hecho alejarse de un estilo de vida como el nuestro, no íbamos a forzarle. Aunque nos pusiese en una encrucijada, encontraríamos una forma para que lo nuestro funcionase con o sin un daddy fijo. Me sobresalté al notar la mano de Jonah sobre la mia. Estaba tan sumido en mis pensamientos que no me había dado cuenta de que se había acercado.

—Que sea dificil, no quiero decir que sea imposible. Chan necesita alguien a su lado y he visto como sonreía después de pasar el día contigo. Necesita recordar porque es parte de este mundo. Necesita saber que está a salvo explorando algo que disfruta.

Me quedé reflexionando lo que me había dicho Jonah el resto de la mañana mientras traspasaba a un Excel para organizarlo mejor lo más urgente que iba a necesitar para la renta de ese año. Jeonghan había llegado lejos, pero mejor que se centrase en su campo. Aquello era un verdadero desastre. Conforme se acercaba la hora de córner, decidí ver en qué se había convertido mi whatsapp tras haberle quitado el sonido. Tenía mensajes de sobra en el grupo para saber que de no haber sido por el trabajo habría tenido una horda lista para interrogarme empezando por mi hermano. Sonreí. Solo llevaba un par de días y ya era parte de ellos pese a que salo había conocido a Seungkwan.