Capítulo 118 - Final

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El cielo era azul en un día soleado al mediodía. Los cúmulos que flotaban en el alto y claro cielo otoñal eran como imágenes, y la luz del sol que se filtraba a través de ellos brillaba cálidamente.

Y en ese paisaje, Hae Ga-joon estaba frente a sus ojos brillantes nuevamente.

—Después de que te fuiste, consulte con el gerente, pero tu información está clasificada como perteneciente a H.N. Entonces, me sorprendió y me puse en contacto con el equipo de TI, y también le pregunté al equipo de recursos humanos.

—Sí, sí. Todos escucharán, así que respira y cuéntamelo.

Tan pronto como escuchó la noticia, Baek Seon-woo vino y habló sin aliento. Los sentimientos de Baek Seon-woo de querer que la gente supiera la situación y el estado de ánimo en ese momento se revelaron en su rostro emocionado, Ga-joon se rió cuando lo vio. Incluso tuvo la ilusión de que una enorme cola se balanceaba detrás de Baek Seon-woo.

Baek Seon-woo, quien respiró hondo cuando Ga-joon hablo, sonrió en un estado más tranquilo. Así que los dos se sentaron en un banco en un parque cercano y hablaron.

Como esperaba Hae Ga-joon, los miembros de H.N dijeron que aún no sabían sobre su reclutamiento. El equipo informático dijo que la información de Ga-joon no era un error, y el equipo de personal también confirmó confusamente su afiliación. En una situación tan tumultuosa, la líder Han Seol-won apareció y dijo en un tono tranquilo: 'Lo recluté'. Fue un saludo muy ligero, como llegar tarde al trabajo, servir una taza de café y dársela.

Así que hubo un poco de conmoción, pero la decisión de la líder fue absoluta y, de hecho, Hae Ga-joon era el talento que codiciaban, por lo que la conmoción pronto se calmó. Un día, planeo recopilar opiniones y proponerle al gerente general que lo reclutara, pero todos pensaron que no sería fácil considerando la familia de Hae Ga-joon. Entonces, a la pregunta de cómo persuadió a ese oponente engañoso...

—La líder me dijo que lo sabría al mirarme.

—Haa, de verdad...

Ga-joon se echó a reír. Era un hombre que usaba la verdad que había aprendido de manera muy efectiva. Ga-joon también le contó cómo obtuvo la tarjeta de la unidad y sacudió la cabeza hacia Baek Seon-woo, quien estaba sorprendido y preocupado. A la líder solo la había visto un par de veces, pero estaba extrañamente convencido.

—Creo que es más útil mantenerlo así si quieres mantenerlo en secreto en el futuro.

—Pero si la líder se enteró, ¿no sería capaz de adivinarlo tu abuela? Otras personas también...

—Es mejor si lo mantenemos en secreto solo así, creo que evitaremos que otros se enteren.

Fue Hae Ga-joon quien reconoció bien a su propia gente. Después de todo, Han Seol-won tiene suficiente poder para enterrar la verdad. Además, solo Shin Seung-min y Han Seol-won conocen la información de que la vitalidad de Baek Seon-woo ha disminuido. Dado que la condición detallada de cada miembro es un secreto que no se comparte, solo se sabe que Baek Seon-woo está en peligro.

Al final de este análisis, el rostro de Baek Seon-woo se iluminó.

—Gracias a Dios. Me preocupaba que se supiera.

—¿...No sería mejor avisarles y recibir una atención más detallada?

—No. Porque dijiste que querías mantenerlo en secreto. Y si se sabe, me preocuparé por nada, y otra vez...

Baek Seon-woo, quien se acercó sigilosamente al banco, tocó la mano de Ga-joon y entrelazó sus dedos.

—Tú te encargarás de eso.

Diente de LeónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora