La cabeza del pequeño monstruo se deslizó hacia un lado. Los ojos blanquecinos parpadearon lentamente un par de veces, luego se abrieron con sorpresa y alegría. El niño gritó brillantemente.
—¡¿De verdad jugarás conmigo?!
De inmediato, el enfoque del monstruo cambió del pequeño auditorio a Ga-joon. Al ver el impulso del monstruo que parecía acercarse en cualquier momento, Ga-joon levantó una mano e hizo un gesto diciéndole que se quedara quieto.
—Sí. Vamos a jugar juntos.
—Entonces, date prisa. ¡Ahora...!
—Quédate quieto. Si actúas imprudentemente, no jugaré contigo.
El monstruo vaciló. Incluso dio un paso atrás, como si estuviera interesado en el ser que no tenía miedo de verlo, y, además, como si estuviera interesado en el acto de 'conversación' con él.
Siguió un momento de espantoso silencio.
Al final de la fría mirada, el monstruo inclinó la cabeza y sonrió. Era gracioso cómo no se estremecía incluso cuando lo miraba fijamente. Pronto, el monstruo sacudió su cuerpo y preguntó: '¿Cómo? ¿Qué vamos a hacer?'
—Si te escondes, te encontraré.
—¡No me encontrarás!
Maldición, es por eso por lo que no le gustan los niños ingeniosos...
Pensó que sería fácil emocionarlo con la idea de jugar a las escondidas, pero esto no lo engañó. Ga-joon chasqueó la lengua y dijo.
—Entonces juguemos a la mancha. Nos esconderemos.
—¿Nosotros?
En el momento en que el monstruo estaba desconcertado por las palabras de Ga-joon, los estudiantes salieron de la sala de conferencias uno por uno. Baek Seon-woo tomó la delantera, seguido de Lee Dong-hoon, Ahn Young-ah y Shim Do-kyung. Las yemas de los dedos de Ahn Young-a temblaron, pero rápidamente cerró las manos con fuerza como si estuviera decidida.
Cuando un total de 5 personas se pararon frente a él, una sonrisa apareció en la comisura de la boca del monstruo. Las mejillas desgarradas se volvieron aún más grotescas.
—¿Puedo encontrarlos a todos y matarlos?
—... No puedes simplemente matar a una persona cada vez que lo encuentras. Tienes que encontrar a todos para ganar.
—¿Ganar? ¿Qué pasa si no puedo encontrarlos a todos?
—Entonces debes morir.
Ga-joon se encogió de hombros como si fuera obvio. Los ojos del monstruo se entrecerraron y la sombra en el suelo comenzó a retorcerse. Un brazo se arrastró frente a la maraña de sombras que parecía estar enredada con docenas de personas. Los niños casi se estremecieron y retrocedieron, pero Ga-joon dio un paso adelante.
Cuando Ga-joon se acercó, la sombra se detuvo. El monstruo inclinó la cabeza de un lado a otro con curiosidad.
—Todavía puedo matarlos a todos.
—Entonces simplemente mátame.
Ga-joon respondió monótonamente y asintió con la cabeza.
—Pero ¿no sería aburrido si me mataras así?
—...
—No es divertido. Es aburrido.
El monstruo no tardó en reírse a carcajadas ante el acto de hacer contacto visual como si no fuera gran cosa. Ga-joon, quien notó que era su palabra favorita, decidió empujar un poco más.
