VIII

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—Mamá, Bokuto-san va a venir en un rato. Estaba por aquí cerca y me preguntó si-

—Corazón, tú sabes que Bokuto-kun siempre será recibido con los brazos abiertos aquí.

—Eso mismo, gracias.

Mi mamá lee mentes. O eso creo yo.

En lo que me arreglaba el pelo, tocaron la puerta.

Supe enseguida que era Bokuto-san, porque me entró una llamada al celular

—¿Hol-

—¡Akaashi, estoy afuera!

—Voy enseguida.

Entró y subimos a mi cuarto para ver alguna película repetida y jugar cartas.

Todo iba bien, y luego preguntó por la noche anterior...

—¿Hice alguna estupidez anoche? seriamente.

—No hiciste nada, Bokuto-san. Ya te lo había dicho...

—Es que de verdad tengo la sensación de que hice algo, ¡pero no sé qué fue!

—¿La combinación de licores? ¿el baile encima de la mesa? ¿cuando tú y Kuroo-san rompieron un florero con el balón de voleibol?

—Ya... Pero algo más, en serio siento que hice otra cosa...

Tuve un dilema mental.

¿Sería bueno contarle?

O quizás... ¿Hacerlo como una metáfora? ¿un caso hipotético?

—Quizás besaste a alguien y no recuerdas a quién...

—Mierda... ¡Eso sería horrible! ¡¿y si hice eso y la persona no me dio su consentimiento?! ¡eso estaría mal! ¡¿y si esa persona tenía pareja?! ay, no... Espero que no haya sido eso...

—Heh, esperemos que no, claro...

—¿A quién pude haber besado, si es que lo hice?

—No lo sé, Bokuto-san, eso sólo lo sabrá la persona...

—Ya, ¿hay sospechosos?

—¿Sospechosos para una situación hipotética?

—Sí, sospechosos hipotéticos.

—¿No sé? ¿Yaku-san, Kimura-san?

—No son mi tipo, no los besaría. Yaku tiene un dilema con Lev y sospecho que Kimura tiene pareja...

—Ya... ¿Y quién es tu tipo? ¿a quién sí besarías...?—. Mierda. ¿Cuándo me volví tan preguntón?

—Bueno, no sé... Alguien... ¿Como tú? digo, eres muy amable, y te preocupas por todos, y eres tan bueno... Y eres lindo, claro, eres muy bonit- bueno, eh, y juegas muy bien voleibol, y siempre escuchas todas las locuras que hablo y... Bueno, todo eso...

—Oh.

—Sí, "oh".

—Ouh...

—¿Por qué le pusiste una "u"?

—Es la impresión, Bokuto-san.

—Ya...

Gracias a Dios que mi mamá nos avisó que Makoto-san estaba afuera.

—Tu mamá está afuera, deberías ir.

—Sí, debería ir...

—¿Te acompaño?

—No, no, no te preocupes. Te ves cansado, Akaashi, intenta descansar un rato.

—Bueno...

—Oye, ¿me permites hacer algo?

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⏰ Última actualización: Oct 21 ⏰

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gay setters (+1) | bokuaka 🦉Donde viven las historias. Descúbrelo ahora