Incense

INCENSE XIX

Sanha separó lentamente su cuerpo de Bin que aún lo estaba abrazando con fuerza y sus lágrimas poco a poco habían dejado de salir.

"Por favor" dijo Bin suplicando, Sanha coloco su dedo indice en la boca del mayor para silenciarlo y después lo tomó del rostro para atraerlo a sus labios hundiéndose en un beso feroz y desesperado, Bin lo tomó de la cintura jalándolo hacia él para sentarlo en sus muslos, la intensidad del beso fue subiendo poco a poco, ambos sabían que se necesitaban, deseaban volver a estar juntos y compartir sus caricias, Sanha quito aquella camisa de pijama que comenzaba a estorbarle y pudo apreciar aquel cuerpo que tanto le encantaba, tocaba delicadamente cada centímetro de aquellos bíceps y pectorales.

Bin lo cargo enredando sus piernas entre su cintura para poder acostarlo y tener mayor comodidad para continuar lo que acababan de empezar, sería una noche larga para ambos que se extrañaban tanto y aprovecharían cada minuto de ella. Se postró arriba del menor y comenzó a desabrochar con solo una mano botón por botón de aquella camisa azul que Sanha traía, mientras lo hacía, bajo a su cuello a repartir besos, lamidas y algunos cuantos mordiscos que hacían soltar algunos ligeros gemidos del disfrute.

Poco a poco fue bajando aún más encontrándose ya en la zona íntima del menor, desabrocho aquel cinturón estorboso y quitó el pantalón por completo junto con su ropa interior dejándolo desnudo, solo con la camisa que aun traía puesta pero desabrochada. Tomó el falo envolviéndolo en su mano y comenzó a tirar desde la base con movimientos lentos mientras se dedicaba a besar los muslos internos lentamente.

"Aghhh" gimió ahogado Sanha enredando sus manos en el cabello del director. Bin bajo a los testículos y disfruto de cada uno succionándolos mientras con su dedo tocaba el agujero del menor en movimientos circulares para después pasar su lengua y deleitarse del sabor de Sanha unos cuantos minutos.

"Bin" dijo Sanha sollozando de placer.

"Shhh" silenció Bin y subió al falo que no había soltado en ningún momento para introducir lo más que pudo a su boca, subió lentamente hasta el glande y se quedó ahí haciendo movimientos circulares en él con su lengua, Sanha volvió a aferrarse al cabello despeinado de Bin mientras esté volvió a tragar, subía y bajaba chupando cada milímetro.

"Bin" volvió a decir Sanha. "Creo que ya voy a... Arghhhh" soltó sin terminar, Bin lo sabía y lo quiso tragar por completo, chupando sus labios subió hasta Sanha para besarlo, estaba deseoso de sentir su apretado agujero envolviendo su pene.

Sanha como buen sumiso se dejaba llevar por lo que el mayor quería, Bin colocó sus manos en las caderas del menor para voltearlo y tener mejor vista de su culo, el cual levanto para amasarlo con ambas manos y quitó lo que le restaba de ropa.

Se colocó detrás de Sanha, quien ahora estaba de rodillas, Sanha hecho su cabeza hacia un lado mientras Bin besaba su hombro y cuello, bajando aquella camisa desabrochada que aún tenía puesta.

"Dame tus manos" susurró al oído, Sanha obedeció y puso sus manos detrás de él, Bin las tomó y las ató con su cinturón sin antes rozarlas con un dulce beso. Tomó a Sanha de la nuca y lo acostó lentamente hasta clavar su rostro de lado en la almohada, volvió a tomarlo de las caderas y alzó su culo comenzando a masajear aquel agujero de carne para empezar a introducir su dedo medio en él.

Poco a poco Sanha acostumbrado pidió más, así que Bin introdujo otro dedo mientras que con la otra mano jalaba su falo endurecido listo para penetrar al menor.

"Hazlo Bin... ya..." Jadeaba Sanha

A falta de lubricante, Bin junto en su boca una gran cantidad de saliva y escupió directamente en el anillo, dirigió su pene a la entrada y adentró su cadera lentamente, jalando las del menor hacia él para no lastimarlo.