Corazones Fríos Y Sentimientos Cálidos

#12

Mientras esperaban a que llegarán los involucrados, Greyfia decidió tomar una desicion, acercándose y moviendo a Kuroka, logró despertarla, a la " peligrosa " criminal clase SSS, la cual a duras penas tenia sus ojos abiertos, con baba saliendo de su boca, Greyfia suspiro. — ¿ podrías tomar a Ophis en tus manos y ayudarme a llevarlos a otra habitación ? —.

Kuroka ascintio aun algo enbobada, viendo al que era el actual Lucifer su torpeza por dormir se quito al instante, la mirada con dagas en su direccion dada por Sirzechs, quito todas sus ganas de volverse a dormir y Kuroka por esto, se termini acercando al oído de la sirvienta y habló con un tono de voz bajo. — ¿ estas segura ?, creo que Lucifer Sirzechs no quiere que me mueva de aquí —.

Grefia miro a su esposo y suspiro. — losiento Lucifer - sama, pero necesitaré a Kuroka que me ayude a llevar a Naruto y Ophis. —

Sirzechs apretó sus dientes y se acercó a Greyfia poniendo una mirada impasible, los que estaban en el lugar no quisieron entrometerse en el problema. — no quiero que la culpable de lo que le paso a mi hermana se valla, por culpa de ella y su manipulación de la memoria, mi hermana mancho su propio nombre, sin contar que aceptaste un trato con los Phoenix para que ellos tuvieran control sobre Naruto. —

Yazaka y Gabriel, estuvieron a poco de arremeter contra la reina más fuerte, pero algo les decía muy dentro de ellas, que mejor escucharan todo, hay muchas cosas que ellos no saben y necesitan recopilar información.

Gruñendo y alzando su voz, Kuroka procedió a hablar. — es suficiente!, no te hagas como que eres mi superior Sirzechs lucifer, haca mi superior a la única que debí obedecer es a Ophis y a Naruto, lo que haya hecho tu hermana no fue mi culpa, si no que fue de ella misma, solo borre parte de su memoria que recordaba que tenia a Naruto bajo su control y que este tenia a Ophis como aliado, el borrar su memoria evitaba que ella tuviera un arma muy peligrosa sin seguro. —

Volteando a ver a Kuroka, Sizechs tenia ganas de golpear a la mujer, cuando justo iba a responder, la voz de Greyfia se hizo sería. — querido esposo — esas simples palabras, casi lograron hacer que tenga un infarto. — no culpes a Kuroka por lo ocurrido, muchas veces trate de comunicarte de lo que tenía Rias en su Nobleza, una pieza increíblemente poderosa, capacidades de evolución constante, energía santa, demoníaca, chakra y caótica, ¿ eso te intereso ? NO!, estabas tan metido en las bragas de Rias - sama y con quien estaba, que no solo omitiste cuando tu propio hijo trato de hablarte de su nuevo amigo Naruto, no solo no me escuchaste y me sacabas de tu oficina, si no que dejaste Kuoh desprotegido, solo para ver una forma de salvar a tu hermana del casamiento de Riser, pues sabes puedo decir ahora lo que tenía en mi garganta, felicidades caíste en el plan de Layla Phoenix, su objetivo al principio fue Rias, pero cuando vieron a Naruto, su objetivo cambió al instante, usaron su inteligencia en vez de su poder, usaron un plan bien tratado explotando la debilidad mental de Rias por su matrimonio forzado y explotaron tu obsesión por tu hermana para obtener lo que ellos querían, yo no te ayudare más Sirzechs!, desde ahora tu y tu hermana se harán responsables de sus propios problemas, ya hable con Benelana - sama y llegamos a la conclusión de preparar a Millicas para cuando el llegue a ser el representante del clan Gremory —

Toda la habitación quedó en silencio, Sirzechs no sabía que decir, trato de culpar a su esposa, trato de culpar a Kuroka, diablos trato de culpar incluso la existencia como tal de Naruto, pero solo llegaba a su mente lo dicho por su esposa, el priorizo a su hermana y su situación, no priorizo nada más, al sentirce culpable por comprometer a Rias, se cegó y creyó que su único deber en estos momentos era solo su amada hermana. Caminando lentamente y haciendo sonar sus tacones, Layla Phoenix entró con su mirada impasible junto a su hija, haciendo una reverencia, Layla se acercó a Greyfia y miró al dormido niño, sonriendo y sintiendo su energía se dio cuenta al instante por que Ravel lo deseaba tanto, miró a los ángeles y a la representante de los Yokais presentes. — si no le importa señor Michael, decidí decirle a la nobleza Sōna y Gremory que no vengan, creo que si se hablara de Ophis y Naruto, creo que ese tema sería mucho más serio de lo que pensamos y solo se necesitaría la pretendía de quienes serán los encargados de cuidar al niño. —