Corazones Fríos Y Sentimientos Cálidos

#30

Sirzechs estaba realmente furioso y en pánico, su reina, su esposa la madre de su hijo se iría de su lado. — no es posible!, se supone que se llevarían a Koneko - san, no a mi amada Greyfia. —

— ara ara — con esa extraña forma de hablar y una risita recatada, Sirzechs miró pálido a la mujer de gran busto y rubia, que caminaba con una Lilith en sus brazos, a sus costados, Ravel y Riser caminaban tranquilos y sin demostrar nada. — esto si es curioso, ¿ aún que donde esta Naruto - san ?. —

Ophis miró a la mujer, luego miró a su hija Lilith, al cruzar sus miradas la pequeña hija de la Diosa Dragon, salió de los brazos de Layla y se acercó a su madre. — ¿ te has comportado como dijo Ruto ?. —

Asintiendo con su cabeza Lilith volteo su cabeza y apunto a Layla. — ella me a dado muchos dulces, ju ... — frunció el seño tratando de comprender. — juego bastante con Ravel - san y Yubelluna - san. —

Ophis entendio que estaba bien. — gracias por cuidarla mientras se hacía esto. — se inclino en reverencia, su expresión no cambió.

Apretando sus dientes y manos, Sirzechs dio unos pasos hasta Layla. — ¿ que mierda pasa haca ?, estas muy equivocada si piensas que dejaré ir a Greyfia, ella es mi reina y esposa. —

Levantándose de apoco del piso, una temblorosa Katase se levantó. — encuentro injusta tu manera de ser demonio!, pensabas quedarte con Naruto sin apostar nada, si Rias ganaba te quedabas con el, si ella perdía debía perder parte de sus amigos, ¿ no crees que deberías tu acerté responsable de lo que quieres ?. —

Sorzechs sonrió en arrogancia. — esta bien!, me haré responsable de esto así que yo luchare contra ti, si me ganas te ... — fue interrumpido por la mirada de odio que tenia la niña.

Sacando un pergamino algo largo, la niña mordió su dedo pulgar derecho, con un poco de sangre saliendo de este, hizo una línea a lo largo. — si pelearemos contigo, entonces usaré todo lo que tengo!. — apareciendo en 3 bocanadas de humo, 3 Dragones enormes aparecieron, tras ella una enorme serpiente egipcia apareció, un dragón con 3 manzanas flotando frente a él y un enorme dragón de color rojo.

Apophis miró disgustado al hombre, era extraño para todos ver rostros tan expresivos en los dragones. — y se supone que yo soy la serpiente, Demonio recuerda tu puto lugar, aceptaste la competencia y perdiste, arrebataste vidas humanas, te has puesto a pensar en que simplemente has perdido y no lograste lo que querías. — Apophis miró directo a sus ojos, sin pestañar prácticamente casi asesino con su mirada al demonio.

Ophis se puso frente a ellos antes de que se pelearan. — nadie luchará, Ruto fue a restablecer ciertas uniones, los demonios en este momento, no están en buenos términos, solo ciertas familias y demonios de alto rango son aceptados por Ruto. — Miró furiosa a Sirzechs y automáticamente el enorme dragón rojo se transformó en un niño y se puso al lado de la Diosa Dragon. — si quieres luchar por Greyfia, lucharás contra mi rata alada. —

Riendo entre dientes Gran Rojo con forma de niño se puso frente al demonio peli rojo, puso sus manos tras su nuca y miró con sus ojos entrecerrados por la risa. — si tantas ganas tienes de jugar, juega conmigo soy parte del contrato del Dios Dragón para los humanos, eres alguien fuerte y molesto, así que me gustaría jugar un poco contigo rata alada. — Greyfia se apresuró a inclinar su cabeza ante los Dragones con forma de niños. — p. por favor no le hagan nada a Sirzechs, e. el no quiso hacer ni decir nada, solo está enojado debido a que perdió. —