Estaba en casa con un short y una blusa negra holgada sin mangas, hacía el suficiente calor como para asarme en casa, una trenza cómoda mientras en el piso estaba mi ropa en la alfombra doblaba.
Hace media hora me había llegado un mensaje de la presidenta de fan diciendo que Sephiroth fue un ángel con ellas, les invito a todas la comida y fue amable pero no pudo soportar más de una hora y media.
Estaba todo listo para guardar cuando la puerta sonó.
Del trabajo a casa hacia veinte minutos pero él tardo media hora, cosa curiosa.
Cuando abrí la puerta me sorprendió su apariencia.
—Wow...
Fueron las palabras que salieron sin permiso de mi boca la ver su vestuario.
Una playera blanca junto a un pantalón de mezclilla mientras que su cabello iba amarrado en una coleta alta.
—Me alegro que te gustara.
Sus palabras me hicieron volver a la realidad para observar sus ojos que se veían brillantes de alguna manera.
—Dame un minuto, mi ropa está por el piso, la estaba guardando.
Entrecerré la puerta para caminar a la alfombra pero primero le baje a la televisión donde el control estaba en la mesa de la comida, al separarme mi pie se atoro en la silla para hacerme caer en seco.
Solo pude meter la mano y mis rodillas.
—¿Estas bien? —Sephiroth abrió la puerta mientras me veía en el piso.
—Creo... —mí vergüenza era tal que mis orejas ardían junto con mi cuello.
Sus manos sin guantes tomaron las mías con suavidad, sus manos estaban llenas de cayos por su entrenamiento.
Me levante con esfuerzo e hice mala cara, llevaba zapatos normales los cuales pedí que se los quitara para entrar.
Era la primera vez que lo dejaba entrar, su mirada se quedó en mi cuando cubrí mi ropa guardando con rapidez en el cajón pero una caja blanca resbaló por el borde.
Cerré el cajón para tomar la caja pero Sephiroth se adelantó tomando la caja que parecía guardar una joya.
—Puedes abrirlo, había olvidado que lo tenía.
No dudo dos veces para abrir la caja.
—¿Dónde conseguiste esto? —tenía una mala cara cuando preguntó.
—Me lo gané en un evento que hizo Shinra —contesté mientras me acercaba.
Una joya pequeña en forma de gota dejaba ver en su interior una especie de agua verde brillante.
—¿Sabes qué es esto? —preguntó severamente.
—¿Tengo que saberlo? —me encogí de hombros—. Se veía caro, lo iba a vender si necesitaba dinero de emergencia.
—Es mako puro —respondió serio tomando la joya de la caja.
—Entonces debe valer mucho dinero.
Admití orgullosa cuando su mala cara me observó con preocupación.
—Es la vida del planeta.
Me quedé callada, no podía pelear con él así que simplemente lo observe mientras tomaba mi hombro y me daba la vuelta.
—Deberías estar orgullosa, ganaste algo muy valioso.
Sus manos pasaron por mi cuello pasando la cadena que descanso en mi pecho, no me sentía incomoda pero era extraño tenerlo tan cerca.
ESTÁS LEYENDO
Entre dos historias
FanfictionKaira conoce a un joven bajo un árbol, no lo llamaría destino y tampoco se atreve a mirarle a los ojos, incluso sabiendo que él la miraba solamente a él. "Yo solo deseo libertad" Esas palabras fueron repetidas, solo cuando la volvió a encontrar. Hi...