OCHO

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Estrellas temporales.

—¿Vampiro? —cuestionó, totalmente confundida—. ¡¿Por qué jamás dijiste nada?!

—Emma, escúchame, cariño, tienes que tranquilizarte.

—¡Estoy tranquila!

—No, no lo estás. Vamos, sentémonos y déjame explicarte todo.

—No quiero escucharte.

—Quizá no, pero deberías.

Suspiro, totalmente cabreada. Me siento en el sofá de la habitación a regañadientes, me cruzo de brazos, él se sienta alado de mí e intenta tomarme de la mano, pero la aparto enseguida y me alejo de él.

—Emma, yo no estoy contigo por lo que soy o por lo que tú fuiste.

—Se perfectamente cuando soy solo un trabajo. Créeme, ya lo fui.

—Que todo empezara porque eras la misión de Aysel no quiere decir que seas la mía —«eso duele»—. Mira, cuando te conocí no sabía quién eras. Tu nombre siempre resonó por el submundo pero yo jamás le preste atención. Fue hasta después, tú y yo ya éramos pareja, entonces supe quién eras en el submundo. Investigue más, encontré que habían borrado tu memoria. Entonces consulté a la clave, ellos me dijeron que nuestra relación podía seguir y yo no tenía que intervenir en el trabajo de los hermanos Askton. Me alejé del tema y decidí seguir a tu lado sin intervenir.

—No te creo.

—Es la verdad. ¿Cuál otra razón podría haber?

—No lo sé, investigarme o yo que mierda se.

—Pues no, solo te digo la verdad. Mantuve alejada mi naturaleza y me centre en ser lo más humano posible para ti, porque te amo. Desde que supe que estaba enamorado de ti entendí que haría cualquier cosa para mantenerte a salvo —el pone una de sus manos en mi mejilla y me obliga a mirarlo—. Emma, te amo, y no estoy contigo por otra cosa que no sea eso. Hemos estado años juntos, merece la pena seguir intentado. No me gustaría para nada que esto arruine lo que tenemos. Si no te dije lo que soy fue porque al escuchar todo sobre tu vida pasada entendí que lo mejor para ti era una vida humana alejada de lo sobrenatural. Y perdóname por ser egoísta, sé que soy soy sobrenatural y eso podría afectarte pero... joder, jamás he sido fuerte para estar separado de ti.

—Entonces tu sabías que hay una caza para mí.

—¿Y quién crees que te mantuvo alejada de eso por mucho tiempo? Desde hace meses que las criaturas llegaban a la ciudad como un foco, eran atraídos por ti. Me encargué de pedirle a mis amigos en la clave que por favor los mantuvieran alejados. Nuestro departamento estaba sellado por runas, por eso nadie pudo entrar. Contraté brujas que te cuidarán en todo momento.

—¿Y entonces cómo fue posible que llegara a Osfort y me secuestraran?

—Tu barco tenía runas, me encargué de eso también, pero ni todas las brujas del mundo podrían competir con la fuerza de Kye.

—Sabes de ella.

—Investigué cada detalle. Busque por todos lados información que me ayudara a protegerte, me enteré de tu conexión con ella y entonces entendí que no podía interferir. Cuando reportaron tu barco como desaparecido supe que algo te estaba atrayendo hacia acá, hay algo dentro de ti que sigue unido a esta ciudad y a estas personas, no hay nada que rompa eso. Te busqué por todos los muelles a los que pudieras haber llegado. Demore mucho en encontrarte y lo siento por eso, debí haber llegado antes y yo... yo lo siento, amor.

Veo sinceridad en sus ojos, no creo que sea mentira, no puedo no confiar en el, y menos ahora que sé que es el la verdadera razón por la que he estado a salvo todos estos meses, le debe eso. Collin me ama, puedo sentir su amor de una manera inexplicable. La manera en la que me mira me dice cosas, y sé que yo también lo amo. Pero no lo amo como a Aysel, no puedo hacerlo. Y tampoco puedo perderlo, es lo único que me hace pensar que no estoy loca, que los cinco años que me fui existen y mis amigos me recuerdan que los años antes de eso también son reales.

Bajo un eclipse total #3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora