AMOR ETERNO

Capítulo 1

Soy Freen Chankima de Bills, Arquitecto de Nacionalidad Tailandesa de 27 años de edad, estoy casada hace 5 años con un hombre maravilloso, su nombre es Heng Bills, Ingeniero de Nacionalidad Estadounidense-Tailandés, de 30 años de edad, sus ojos es de color castaño claro y con un cabello de color marrón, realmente es muy atractivo y me adora, hace todo lo que sea para hacerme feliz. Y yo intento hacerlo también, aun a veces creo que no hago lo suficiente.

Tenemos una empresa de construcción en la ciudad de Bangkok y estamos emocionados porque haremos negocio con una de las empresas de diseño y arquitectura más renombrada de Londres, cuyos dueños pertenecen a la alta sociedad inglesa y hasta me atrevería asegurar que forman parte de la realeza como lo es la familia Armstrong.

Ya programada la reunión nos dirigimos a Londres, fuimos recibidos en el aereopuerto por el chofer particular del Ing. Nieles Armstrong, el Empresario más exitoso de su país y Presidente de la empresa "Armstrong Art and Desing group", nos hospedaron en la suite presidencial del "Great Northern Hotel". Un gesto muy amable de su parte.

"Wao...!! Es impresionante esta habitación", expresé con mucho entusiasmo, como si fuera una niña.- "ven Heng mira la vista".

"Sí, es hermoso todo cariño, lo único es que hace mucho frío.", aseguró mientras se daba calor así mismo. Me acerqué con una tierna sonrisa para darle calor a sus antebrazos y un tierno beso, mientras me dirigía hacia al baño admirando cada rincón de él (debo decir que es importante para mi esta parte porque me sirve para relajarme completamente) y del resto de la habitación, observando las pinturas y obras de artes así como aspirando el olor a antigüedad que tanto me gustaba.

"Yuki, estaría fascinada con esta decoración".- reafirme mientras daba vueltas sobre mis talones y sonreía imaginando a mi mejor amiga tratando de tomar foto a todo e investigando su procedencia. "Es una artista brillante",- puntualicé muy orgullosa.

Descansamos un par de horas para luego vestirnos ya que teníamos la primera reunión personal con la familia Armstrong. Conocíamos al Presidente, su esposa la Condesa Taimes y al Asesor del Ing. Armstrong el Sr. Roberth Wells, por conversaciones vía remota y videos llamadas, sin embargo, al parecer faltaba conocer a la hija y heredera del negocio, la cual, también era la CEO y Directora Legal Ejecutiva y quien al final daría el visto bueno de nuestra empresa para la fusión.

Les mentiría si les digo que no me sentía nerviosa y emocionada a la vez.!!.

Bajamos al restaurante del hotel, donde se llevaría a cabo la reunión, fuimos dirigidos por el Hostess hasta la mesa que nos fue reservada, allí nos esperaba la familia Armstrong, reconocí a lo lejos a la pareja. Al acercarnos, noté la presencia del Asesor y a una chica casi de mi edad, ojos color miel y cabello largo color castaño, casi hasta la cintura.

Heng y yo saludamos con entusiasmo, mientras sentía una mirada clavarse en mí, haciéndome sentir un tanto inquieta.

"Permítanme presentarles a mi hija Rebecca Patricia, la luz de mis ojos".- dijo el Sr. Armstrong muy orgulloso al presentar al sol de su vida, hija única del matrimonio y heredera de todos sus bienes.

"Mucho gusto..., un placer al fin conocerlos. Mi padre me ha hablado mucho de ustedes"... enfatiza con una sincera sonrisa, extendiendo su mano. Esas manos que cuando tocaron las mías se sentían tan cálidas, pude apreciar que su agarre duró unos segundos más que cuando se las ofreció a Heng, y su mirada se perdieron en mis ojos causando en mí una sensación de calor, incógnita y algo de nerviosismo; nunca había experimentado una mirada tan profunda como si estuviera buscando en lo más recóndito de mi ser, algo que necesitara conocer.

La velada prosiguió con toda normalidad, hablando de varios temas que iban de lo profesional a lo personal, mientras seguía sintiendo esa mirada que escaneaba cada uno de mis movimientos, como si no quisiera perderse de nada. Mientras, por mi parte intentaba no mirarla directamente, sin embargo era como un imán, me atraía hacia ella, por lo que varias veces me percate observándola y un par de veces, nuestras miradas se encontraban fugazmente; no podía mantener su mirada por lo que la retiraba de inmediato, lo que le hacía gracia a ella y me ponía nerviosa a mí.

"Cuantos años llevan casados?".- preguntó Rebecca con curiosidad. Heng inmediatamente respondió muy orgulloso. Mientras Rebecca seguía indagando sobre nuestras vidas, "Y tienen hijos".- preguntó nuevamente. "No", esta vez respondí yo, mientras se asomaba una tímida sonrisa en sus labios.

"Y usted Señorita. Armstrong, que nos puede contar al respecto".- Preguntó divertido Heng, haciéndome sentir algo nerviosa por la respuesta que ella pudiera dar. No sabía por qué me sentía así, ¿estaría con alguien?, y a mí porque me podría importar si está con alguien o no, ¿Por qué estoy pensando eso?

"No he encontrado a la persona adecuada, todavía no ha aparecido la mujer que me quite el sueño y me haga suspirar.... Aunqueeee... si le soy sincera"...se inclina un poco a la mesa como si fuera a decir un secreto. "Ya no estoy tan segura de eso".- Sentí mis mejillas enrojecer cuando esos ojos miel, se clavaron en mí nuevamente. Perooo..., que es todo esto????, me cuestioné, porqué ella me mira de esa forma?, como un animal cuando caza a su presa. Y por qué me siento tan nerviosa, por qué me afecta tanto su mirada?. Mi corazón comienza a latir más rápido de lo normal y empiezo a sentir la falta de aire, por lo que tengo que salir de allí. Creo que fue algo exagerada mi actitud, pero es que nunca una mujer me había hecho sentir nerviosa, y eso me asusta.

"Disculpen ya regreso.... necesito ir al baño", tomé la mano de Heng mientras me levantaba y el asintió con una tierna sonrisa.

Me dirigí al baño a toda prisa, me puse frente al espejo y observe mi rostro tenso, enrojecido y con gotas de sudor alrededor de mi frente, coloque un poco de agua en mi cara para refrescarme, cuando de repente siento, que la puesta se abre.

"Te sientes bien Freen?, parecíasun poco alterada"., sentí un suave calor regresar a mi cuerpo y mi corazónacelerarse nuevamente cuando tenía a escasos centímetros de mí a esa hermosamujer, mientras la observaba a través del espejo.