Artsy dreams 《Shinez》

《6》

~ Yunjin ~

Zuha decidió mudarse a mi casa, dejando el pequeño departamento que había rentado cerca del hospital, y trajo su auto dejándolo en el estacionamiento personal.

Aun me parecía increíble la decisión de Kazuha de vivir conmigo, ir a trabajar juntas para conseguir dinero e iniciar nuestro sueño juntas, la noticia iba a parecer un shock para todos, o eso es lo que veía venir, apenas habían pasado 9 meses desde que llegó.

Empezamos el día con cirugías programadas de pacientes pediátricos, Kazuha estaría hoy de primer cirujano, yo de primer ayudante y Eunchae de segundo ayudante; Sakura ya tenía preparado todo el material para anestesia y circulación especial extracorpórea para la cirugía, la cual se trataba de un cierre de comunicación interauricular y ventricular de un niño de 2 años.

¿Lista?

Nací lista.

Se dio por iniciado el procedimiento, el cual duraría unas 4 horas, siempre me quedaba admirada por el trabajo de Zuha en cirugía cardiovascular, no era mi fuerte pero me parecía interesante el tema de cirugía cardíaca pediátrica.

Eunchae estaba curiosa ante el procedimiento, era de las pocas veces que entraba a una de éstas y la sentí insegura sobre algunos pasos, Zuha intentaba explicarle sobre el tipo de cirugía correctiva, no era sencillo pero ella lo hace parecer fácil.

Las 4 horas pasaron rápidamente, pero consumieron mi energía, fue bastante atrevido por parte de Kazuha haber hecho tal cosa, y de verdad cada día me enamora más su solo existir.

Lo hiciste bien amor…

Pero también ayudaste, así que parte del crédito es tuyo…

Nos sonreímos cuando nos íbamos a los vestidores, tratamos de ir rápido para ir a descansar un momento antes de la hora de salida.

Zuha se dejó caer sobre el colchón, y yo me puse encima haciéndole cosquillas, nos quedamos abrazadas, sin intenciones de separarnos, su cabeza se pegó a mi pecho y yo besé su frente.

Esto ha sido divertido…

Todo es más bonito contigo Yun…

Sin darnos cuenta la hora ya había terminado y era hora de volver a casa, fuimos hasta el auto y esta vez era mi turno de manejar, nos pusimos nuestra música favorita en un intento de hacer karaoke en el auto; llegamos a casa y Zuha fue corriendo a buscar sus cosas ya que había empezado a tomar clases de ballet por su cuenta, y yo la esperaba mientras componía algo de música o tocaba su pieza favorita.

Zuha no te vayas…

Tonta tengo que ir a ensayar…

A mí me encataba abrazarla, era como un curita al corazón, pero como era de esperar Kazuha tampoco quería soltarme, hasta que yo dejé que se fuera, no sin antes darme un beso como siempre suele hacerlo antes de irse.

Regresaré temprano lo prometo…

Estaré esperándote con el piano para verte bailar de nuevo.

Sentía un poco vacío las veces que se iba a ensayar, pero también me servía de inspiración su ausencia y recordar todo lo que había pasado hasta llegar aquí.

Incluso con ese recuerdo que me atormenta por la noche.