Truly... Madly... Deeply

Capítulo 1

Ninguno de los dos hombres que actualmente estaban enredados en la cama, recordaba la razón por la que todo esto había empezado, pero si recordaban la fecha en que empezó. Tecnicamente, no había nada de malo en que ambos estuvieran teniendo sexo sobre aquella cama, compartieran casa y vivieran juntos como haría cualquier pareja casada.

Excepto que ellos dos no estaban casados. Tampoco compartían sangre pero a ojos de la gente, su relación podía considerarse un tabú. Harry y Severus eran a ojos de la sociedad mágica, padre e hijo. O mejor dicho, padrastro e hijastro.

Harry era hijo de James Potter y Lily Evans, quienes se casaron apresuradamente al cumplir los 19 años. Había una guerra sucediendo y James había quedado prendado de la pelirroja desde que la vio en el tren cuando ambos ingresarían a Hogwarts. Él era un niño mimado y Lily pensaba todo lo peor de él.

Pero cuando llegaron al último año, Lily observo un cambio en James y decidió darle una oportunidad. Esa decisión hizo que un año luego de haberse graduado de Hogwarts y con la guerra propiciada por Lord Voldemort llegando a un punto álgido, ambos sintieran que si no se casaban en ese momento, podrían morir sin haber conocido esa vida.

Un año después llegó Harry a sus vidas y cuando el niño cumplió un año y meses, la guerra acabó. Albus Dumbledore y Gellert Grindelwald, junto con varios de sus conocidos de la Confederación Internacional de Magos y antiguos partidarios (que estaban pagando con servicio comunitario su condena), lograron darle un golpe mortal al Señor Oscuro y la paz regreso a Gran Bretaña.

La paz es un estado complicado para muchas personas. Aunque parezca extraño, hay personas que necesitan el caos, el drama y la zozobra para funcionar correctamente. En el caso de la pareja Potter, esa zozobra y caos era el motor para que funcionaran.

Lily no se sentía satisfecha como madre y esposa, así que con el mundo en paz, empezó a estudiar para presentar sus exámenes de Maestría de Encantamientos. James, que ahora se encontraba siendo padre y esposo, se sintió abrumado y empezó a salir cada vez más con su antiguo grupo de la escuela, menos Peter Pettigrew a quien se descubrió siendo un espía para el Señor Oscuro y fue condena a Azkaban.

En medio de todo esto, Harry estaba siendo cuidado por un elfo domestico hembra, que había sido entrenada para cuidar bebés. Lily se oponía mucho al uso de elfos domésticos, pero estaba demasiado agradecida de que las tareas domésticas y el cuidado del bebé quedaran en manos de ella, que prefirió fingir demencia sobre sus convicciones anteriores.

Ni ella, ni James se sentían bien siendo padres y una pareja casada, así que Harry creció siendo cuidado por la niñera elfo y no conoció nada mejor hasta que empezaron las citas de juego con otros niños.

James organizo esas citas, con Lily asintiendo a las decisiones de su esposo. Los primeros amigos de Harry fueron la sobrina de Amelia Bones, Susan y el hijo de los Longbottom, Neville. James creía que Harry apenas podría manejar dos amiguitos con 3 años recién cumplidos.

Cuando Harry llegó a los 5 años, semanas después de su cumpleaños, James y Lily se sentaron a hablar seriamente. Ninguno estaba feliz con su matrimonio. No es que no se hubieran amado en su momento, pero ambos podían reconocer que se casaron pensando que morirían durante la guerra.

Le había pasado a otras parejas pero algunas habían sobrevivido a la posguerra, como había sido el caso de los Weasley, quienes se casaron durante el inicio de la guerra y aun seguían juntos. Los Longbottom se casaron casi al mismo tiempo que ellos, pero no era la misma situación, ya que Alice y Frank tenían un contrato de compromiso previo a Hogwarts y ocuparon el tiempo de la escuela para ver si funcionarían. Resultaba que si lo hacían.

Su caso era el de esas parejas que se juntan bajo circunstancias extremas, con la adrenalina a tope y confundiendo sus propios sentimientos. No funcionaban juntos y eso a la larga los haría resentirse, y no querían que nada de eso se trasladara a Harry.