Presentaciones

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En otro lado del campus

-¿¡Ka-Kanon!?- el gemelo menor al escuchar su nombre giró de inmediato.

-¿So-rren-to? ¿qué haces aquí?

-Kanon, sí, eres tú-el chico de cabellos lilas y ojos rosados se abalanzó sobre el- no sabes cuánto te extrañe, por eso decidí venir aquí, entre en el programa de intercambio de mi escuela y...

-Sorrento yo... no sé qué decirte- lo aparto del abrazo- no creí que vendrías hasta aquí.

-¿Y como no hacerlo? después de todo lo qué pasó en tu visita vacacional a Austria.

-Sorrento, respecto a eso, solo fue una aventura vacacional, yo no creí volver a verte, fue algo pasajero, ya sabes pasarla bien un rato y decir adiós, sin compromisos, ni ataduras.

-¿Pero que dices? ¡Eres un maldito desgraciado! ¿¡Solo me utilizaste!?

-Era obvio ¿no? Yo te dije que estaba enamorado de alguien más y aún así tú aceptaste estar conmigo, ¿no creerías que en ese poco tiempo, me enamoraría de ti o si? Digo, solo fueron un par de semanas, ¡esto no es un cuento de hadas!

-Sí, ¡ya me di cuenta que no lo es! pues de ser así, tu serías la maldita bruja malvada. ¡Te odio Kanon, eres un maldito imbécil!- el chico salió corriendo del pasillo en el que se encontraba, dirigiéndose al baño, llorando desconsoladamente.

Mientras con Milo

-Profesor me permitiría pasar.

-Milo ¡mi estudiante estrella! ¡claro que puedes pasar! pero antes debes ir con el director, pidio tú presencia en su oficina.

El chico entró al salón y dejó su mochila para después salir hacia donde lo solicitaban.

-Con su permiso profesor en un momento vuelvo.

El joven escorpius caminaba hacia la oficina cuando al pasar por los baños escuchó algunos sollozos.

-¡Dios mío, la llorona! no digas estupideces Milo-se dio una cachetada- estamos en Grecia no en México- lentamente se acercó a donde se escuchaban los lamentos, entro al baño y una vez ahí pregunto- hola ¿hay alguien ahí? ¿estás bien? ¿Necesitas ayuda?
Los lamentos cesaron y poco a poco una puerta comenzó a abrirse, dejando ver a un chico de cabellos lilas y ojos rosados.

-"Pero qué chico más lindo, ¿quien habrá sido el imbécil que lo hizo llorar?"

-Hola, sí, lo siento solo tuve un mal rato- le dijo mirándolo a los ojos- pero ya estoy mejor gracias.

-Eres nuevo ¿verdad? Nunca te había visto en la escuela "y créeme jamás olvidaría a un ángel como tú" Yo soy Milo- le extendió la mano y al tocarlo una cálida sensación se apoderó de él.

-Mi nombre es Sorrento Siren soy estudiante de intercambio y vengo de Austria.

-Wow genial, entonces ven conmigo, te llevaré con el director y podrías decirle quién fue el bobo que te hizo llorar, o decírmelo a mí para darle su merecido.

-No es nada importante, mejor vamos no quiero que te regañen, ni a mi tampoco en mi primer día.

Milo lo tomó mejor de la mano, y se lo llevó del lugar, provocando en el joven recién llegado un ligero sonrojo.
Una vez frente a la puerta del director, tocó esta y un adelante sonó indicándole la entrada. Ya estando adentro, pudo ver que ahí, se encontraban tres chicos más, reconociendo al joven a quien le había tirado el café encima.

-Milo, gracias por venir, ¡que bien encontraste al último joven que faltaba!-dijo señalando al peli lila- te he mandado traer, para pedirte que muestres el campus a los nuevos estudiantes extranjeros, primero llévalos al salón y pueden ausentarse de las demás clases para que les muestres el lugar.
Jóvenes el es Milo Escorpius, uno de mis mejores estudiantes, buen deportista y músico.

Amor tardío Donde viven las historias. Descúbrelo ahora