Capítulo 20, No me sueltes

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Diego y Martina se voltearon a ver el uno al otro, tratando de descifrar el objetivo de Samu, Diego sonrió y Martina asintió. Los tres se dirigieron al restaurante del hotel en Guadalajara, se sentaron y Samu los miró a los dos y sonrió.
-Sucede algo Samu?- cuestionó Diego
-Organice esta cena porque no me parece la situación que está sucediendo aquí con ustedes dos- dijo calmadamente
-Yo..,- Martina comenzó a titubear, estaba segura que Samu sabía lo que Diego y ella tenían
-No es lo que tu crees Samu- contestó Diego nervioso
-Tranquilos, no se dan cuenta que la amistad que ustedes tenían era grandiosa, no cualquiera la tiene, se la pasaban juntos e incluso animaban al grupo cuando alguien se sentía mal, ahora no se miran, raramente se dirigen la palabra y hasta de mal humor están los dos- afirmó Samu
Diego recordó todos los momentos con Martina en la gira, sonrió y puso su mano en la pierna de Martina por debajo de la mesa.
Martina al sentir la mano de Diego en su pierna comenzó a sentir las palpitaciones en su cuerpo, negó con la cabeza y lo miró seriamente, Diego únicamente sonrió y Martina quitó la mano de Diego de su pierna.
-Enserio quieren estar peleados y distantes?-preguntó Samu
Martina y Diego se miraron con tristeza y bajaron su mirada pues sabían que Samu tenía razón
-Escuchen la amistad es algo muy valioso y no se puede perder en tan poco tiempo, no sé el motivo de su separación pero vamos es algo que se puede arreglar hablando no?- continuó Samu
-No, la verdad no podría alejarme de ti- susurró Diego mirando fijamente a Martina
-Y tú Martina estás dispuesta a recuperar la amistad de Diego?- preguntó Samu emocionado
-Yo tampoco puedo estar alejada de ti, te extraño Dieguito- respondió en un susurró clavando sus ojos marrones a los de él, comenzando un juego de miradas por parte de ambos.
-Ya es hora de que sienten cabeza y vuelvan a ser esos chicos alegres y bromistas en el grupo, son muy buenos amigos como para dejar de hablarse -sonrió Samu y los rodeó con sus brazos a los dos
El mesero llegó con los platillos, fue una cena mexicana pues eran tacos, los tres compartieron una velada llena de risas, anécdotas y aventuras compartidas.
Al finalizar , Samu pidió de favor al mesero que les tomará una foto a los tres, la subió a su instagram e incluso puso la palabra love en la descripción de la foto.
Los tres subieron a su habitación, Samu se despidió de ellos para que pudieran tener la charla que se debían.
Martina se dirigió a su habitación y Diego entró tras ella, se sentó en la cama y Martina quedó frente a él.
-Haz escuchado lo que dijo... no podemos alejarnos- exclamó Diego
-El se refería a nuestra amistad, Diego aún seguís con Clara- respondió Martina
-Porqué no me queda de otra enana, no quiero que por mi culpa salgas perjudicada-contestó Diego levantándose de la cama para quedar frente a Martina-Tú volviste con Peter- levantó su tono de voz y la miró fijamente, recordando las fotos que había visto de Peter y ella
Martina negó con la cabeza, suspiró frustrada no podía creer que él pensará que aún seguía con Peter, ignoró a Diego y se metió al baño cerrando la puerta fuertemente.
Diego frunció sus cejas en señal de no entender nada, sonrió y se dirigió al baño pero no pudo abrir la puerta pues Martina la había cerrado.
-Pero que inmadura eres Martina- exclamó riendo Diego -abre la puerta para poder tener una reconciliación como nos merecemos- exclamó Diego
-No, estoy enojada!- gritó Martina aguantando la risa
Diego recargó su espalda sobre la puerta del baño, esperando que se abriera pero pasaron diez minutos y Martina no abría.
-Martina ... no te enojes preciosa- susurró sentándose lentamente recargando su espalda sobre la puerta
Esperó alguna respuesta pero no la tuvo así que volvió a tocar la puerta del baño
-Puedes abrir la puerta? -pidió Diego pero nuevamente se escuchó silencio -Martina...por favor!- dijo frustrado recargando la cabeza en la puerta
Martina soltó una risita, abrió lentamente la puerta del baño, Diego al estar recargado se cayó y soltó también una risita, se levantó y se encontró con Martina en pijama.
-Diego, hablamos mañana- exclamó en un bostezó
Diego negó -No me quiero ir - gruñó caminando hacia la cama
-Dale Diego, déjame dormir- ordenó Martina acostándose para dormir
Diego se sentó en la cama, dándole la espalda a Martina -Pero está todo bien entre nosotros? ... yo no quiero seguir alejado de ti, yo te quiero Martina- susurró Diego
Martina se acercó a Diego y lo abrazó por la espalda, Diego al sentir el tacto de Martina esbozó una sonrisa automáticamente.
-Yo también te quiero, no sabes cuanto- susurró Martina
Diego tomó los brazos de Martina para evitar que ella rompiera el abrazo pues hace mucho que no sentía un abrazo suyo.
-No me sueltes-susurró Diego con voz ronca
-No lo haré- dijo susurrando
Los dos se quedaron estáticos, disfrutando del abrazo, impregnándose de su aroma, ambos cerraron los ojos y esbozaron una sonrisa.
Martina no quería volver a sufrir por Diego, no estaba dispuesta a seguir lastimando a Clara, así que besó la mejilla de Diego dulcemente y rompió delicadamente el abrazo.
-Pero está vez le haremos caso a Samu- rompió el silencio Martina
-A que te refieres enana?- cuestionó sin comprender las intenciones de Martina
-Seremos solamente amigos Diego- afirmó dulcemente Martina
Diego giró su cuerpo para encontrarse con el rostro de Martina, suspiró comprendiendo que era lo mejor, asintió y besó la frente de Martina lentamente.
-Nos mantendremos alejados cuando esté Clara o Peter presentes- exclamó Martina
-Siempre te cuidaré Martina- susurró Diego cerca de los labios de Martina
-Ahora ya ándate a dormir por favor y déjame dormir!- exclamó Martina separando su rostro del de Diego
Diego soltó una risita, se levantó de la cama de Martina y se dirigió a la puerta
-Dulces sueños princesa- exclamó
Al día siguiente los chicos bajaron a desayunar, Martina y Diego se sentaron juntos y todos los del elenco los miraron fijamente.
-Algún problema?- cuestionó Diego
-Al contrario hermano, ya era hora de que hicieran las paces - respondió Facu alegre
-Parece que son una pareja de años por las discusiones- exclamó Alba riendo y Martina se atraganto con un pedazo de pan .
Mercedes ayudó a recuperarse a Martina, el elenco comenzó a reír y Martina se tornó de un color rojizo.
-Nada que ver Alba, somos mejores amigos así como Cande y Facu- contestó nervioso Diego
-Vaya pero nosotros no nos peleamos tanto - respondió Cande abrazando a Facu
-Cada quien- bufó Diego y los demás rieron
Dieron el último show en Guadalajara el cual salió bien, el público mexicano gritaba demasiado y se entregaba con mucha pasión, Jorge seguía emocionado por estar en su ciudad.
 Los chicos estaban reunidos en el camerino de Diego y Jorge, Jorge aprovechó para agradecer a Samu pues Diego volvía a sonreír nuevamente e incluso a realizar bromas con él.
-Hey, lo lograste amigo- exclamó Jorge
-Solo era cuestión de jalarle las orejas a esos dos- sonrió Samu
-Y que lo digas - ambos soltaron carcajadas.
Después del show, Jorge invito a todo el elenco a cenar tacos a un restaurante con su familia pues nuevamente se tendría que reincorporar con el elenco para continuar la gira en Monterrey.
Al día siguiente partieron a Monterrey donde tuvieron un día libre y lo aprovecharon todos en la pileta.
-Qué pasó con Chachi?- preguntó Mercedes a su amiga
-Hablamos y decidimos ser amigos solamente- contestó Martina
-De nuevo? Ay Martina no les durara ni una semana y lo sabes, volverán al mismo juego- rió Mercedes
-No, así la estamos pasando bien! - negó Martina
-Apuesto a que en menos de una semana vuelven con sus beneficios- guiñó su ojo Mercedes y ambas rieron
El show en Monterrey estuvo lleno, las entradas se agotaron y los recibieron muy felices. Llegaron después del show al hotel pues tenían un vuelo muy temprano hacia Medellín Colombia.
-Podemos hablar? - preguntó Mercedes a Jorge interrumpiendo la lucha de pulgares de Jorge y Diego
-Ve Jorge, me voy a dormir buenas noches, descansen chicos!- exclamó Diego despidiéndose de ambos
-Te puedo preguntar algo Mercedes?- cuestionó Jorge
-Claro- afirmó Mercedes
-Te cae mal Diego?- bufó Jorge
-No, yo adoro a Chachi pero Martina estaba sufriendo por él y eso no se lo perdono a nadie- cruzó los brazos Mercedes
-Eres una gran amiga- sonrió con ternura Jorge
-Pero sabes me di cuenta que Martina sufre más sin él que con él, así que ya no me meteré simplemente estaré para ella cuando me necesite- exclamó emocionada
-Esa es la Mercedes de la que me enamoré!- contestó feliz Jorge uniendo los labios de él con los de la rubia.
A la mañana siguiente los chicos fueron al aeropuerto temprano y abordaron rumbo a Colombia. Diego se sentó junto a Samu.
-Hey Samuka!- exclamó Diego
-Que pasó Chachi- respondió feliz
-Quería comentarte que ya arreglamos nuestras diferencias Martina y yo, todo gracias a ti, eres grande- agradeció Diego
-Pude notar que están bien nuevamente y eso me hace feliz- respondió
Facu y Jorge se sentaron juntos, en los asientos de a lado, Jorge sacó su celular y comenzó a grabar contenido para su canal, Diego iba riendo con Samu pues estaba muy feliz por recuperar la amistad con Martina así que comenzó a bromear, simulando que era Superman y volaba, Jorge aprovechó y lo grabó para el canal.
-Deberías de separarte de Jorge se te está pegando lo loco- carcajeó Samu
Diego aplaudió -Estoy feliz- sonrió
-Estás aprendiendo del mejor- alardeó Jorge refiriéndose a la broma de Diego y los cuatro rieron.
Los chicos llegaron temprano a Colombia y aprovecharon para ir de compras a un mall, Jorge iba a comprar video juegos con Diego pero interrumpieron sus planes.
- A donde crees que vas Blanco?- preguntó Mercedes
-A comprar videojuegos, creo- contestó titubeando
-Vos venís conmigo, necesito comprar cosas y que veas mi vestuario-gruñó Mercedes
Jorge bajó su cabeza y Diego comenzó a burlarse de él
-No te burles Domínguez que vos venís conmigo - aclaró Martina tomando el brazo de Diego
-No enana por favor!- rogó Diego y Martina soltó una risita de triunfo
Había pasado más de una hora, Martina entraba a cada tienda mientras Diego se sentaba afuera de los probadores cuidando todas las bolsas de ella.
Martina se encontraba probándose un traje de baño pero alguien se coló en su vestidor
-ándate loco !- gritó Martina
-shhhh, nos van a escuchar- dijo Diego divertido
-que haces aquí? - preguntó bajando el tono de voz
-ya me aburrí, además creo que merezco un premio - dijo seductoramente, acercando su rostro al de Martina
-No! recuerda que somos solo amigos y ya está, se me ocurre algo mejor- susurró Martina acercando su rostro al de Diego
-Dime- tartamudeó Diego deseando sentir los labios de Martina
-Ayudarte a comprar ropa- soltó una risita
-Ah, vaya - contestó desilusionado
Diego salió cuidadosamente del probador afortunadamente nadie lo vio pues la chica que estaba atendiendo se encontraba hablando por teléfono, Martina salió del probador compró el traje de baño, Diego cogió las bolsas, ambos salieron y entraron a una nueva tienda.
-Aquí encontraremos todo, es la tienda favorita de Fran- gritó emocionada Martina
-Cómo tú digas- bufó Diego
Diego tomó una camisa de mezclilla, Martina negó pero Diego la ignoró y se metió a los vestidores. Martina se encargó de recorrer la tienda y tomar varias camisas, pantalones y hasta un traje de baño blanco.
Diego retiró la camisa que se había probado de su torso, Martina entró con mucha confianza al vestidor y asustó a Diego
-Joder que susto enana- rió Diego
-Shhh, vas a probarte esto- ordenó Martina
-Lo que ordenes- ironizó Diego
-Les recuerdo que el vestidor es personal y para una sola persona- gruñó la señora que estaba en turno y ambos rieron
-Disculpe pero tengo que meterme con él, no sabe combinar y le hace falta un buen look- gritó Martina
-Piensas quedarte aquí conmigo?- se sorprendió Diego
-Sí y no intentes nada, únicamente quiero ver que compraras y que no- aclaró Martina y Diego asintió
Diego se probaba la ropa, aprovechó para intentar seducir a Martina haciendo algunas poses sexys, ella se concentraba en la ropa pero le era difícil pues el abdomen marcado de Diego y con solo verlo en ropa interior comenzaba a hervirle la sangre y querer romper distancias con él.
-Ya que por lo visto no saldrán, encontré unas chaquetas de cuero para ustedes ya que forman una pareja muy linda- gritó la empleada
Martina salió apenada del probador
-Se lo juro que no estamos haciendo nada- se excusó
-No se preocupe señorita, miré que bonitas chaquetas- se las entregó 
A Martina le fascinaron tanto que sin consultarle a Diego las compró de contrabando, eran dos chaquetas de cuero de color negro, después de pagar volvió al vestidor para apresurar a Diego.
Las compras terminaron, Diego y Martina fueron los últimos en llegar al hotel, hacía muchísimo calor, Diego estaba muy cansado de caminar toda la mañana e incluso al medio día y cargar las bolsas, Mercedes le avisó a Martina que todos se encontraban en la piscina.
Diego y Martina subieron a la habitación de Martina, ella le entregó la chaqueta, le dedicó un sonrisa de aprovasión y  cansado dejó las bolsas en el cuarto de Martina.
-Que pasó Diego?- preguntó Martina
-Tengo calor y estoy cansado, nunca pensé que ir de compras contigo fuera así - se quejó Diego
-Ya Dieguito tranquilo fue divertido - se burló Martina
-Eso si, me encanta estar contigo y lo sabes- sonrió
-Vamos a la piscina con los demás- sugirió Martina y Diego asintió
Diego estaba muy cansado se puso su traje de baño y se dirigió a la piscina, buscó con la mirada a Martina pero no la encontró así que se recostó en un camastro para esperarla.
Martina bajó a la piscina en busca de Diego, se colocó bloqueador y Mercedes interrumpió su búsqueda para ir al jacuzzi con ella.
Los chicos ordenaron la comida ahí, Martina estaba buscando a Diego ya habían pasado tres horas y no lo había visto, le preguntó a Jorge pero ni él sabía de su paradero, comenzó a buscarlo entre los camastros y lo vio dormido.
-Diego!! - gritó Martina angustiada
-Uhmmm- gruñó Diego
-Boludo te quedaste dormido con este sol y no te pusiste crema protectora- exclamó Martina preocupada
-Ahh- se quejó Diego pues le ardía todo el cuerpo
-Estás todo rojo! vamos a mi habitación- dijo Martina aguantando la risa
Diego con cuidado se levanto del camastro, acompañó a Martina a su habitación, durante el camino soltaba algunos quejidos y Martina negaba con la cabeza
-Anda a bañarte, iré por un short a tu cuarto- ordenó Martina
-No enana me va a arder!- se negó Diego
-Cállate y báñate, tu piel necesita hidratarse- ordenó Martina y Diego obedeció
Después de bañarse Diego se acostó boca abajo lentamente en la cama de Martina, ella le llamó a Mercedes para preguntarle algún remedio, así que agarro las cremas de hidratación y con cuidado empezó a masajear la espalda y hombros de Diego con las cremas.
-Ahhhhhhh! No me toques Martina- gritó Diego
-Sos re tarado a quien se le ocurre olvidar ponerse crema protectora y dormir una siesta- lo regañó Martina
-Joder me duele puta madre!- exclamó en un gritó de dolor
-No digas groserías Diego!- le dio un golpecito en el hombro y Diego gritó
Martina finalizó de ponerle las cremas de hidratación a Diego con mucho cuidado, Diego seguía soltando gritos de dolor causándole risas a Martina.
-Tendrás que dormir aquí, yo me iré a tu habitación- exclamó Martina
-No! no me dejes en estos momentos enana, me duele mucho- se quejó Diego
-Está bien dormiré aquí contigo, cuidando que cicatricé - aceptó Martina acomodándose lejos de Diego pues no quería lastimarlo en la noche.
Al día siguiente Diego ya se sentía mejor, su piel ya estaba hidratada, se despertó con una sonrisa al ver a Martina a su lado aunque fuera a gran distancia.
Tuvieron el show en Medellín, la plaza de Toros se llenó por completo. Después fueron a Bogotá, al salir de la habitación Diego y Martina se habían puesto las chamarras que Martina había comprado en Medellín.
-A bueno, aquí está mi gemela- rió Diego al verla
-Gracisosito- se burló Martina
En los MG de Bogotá Diego y Martina salieron con la chamarra, el hashtag Dietini volvió a activarse, así que después del show Diego recibió una llamada de Clara
-Diego, explícame la foto- gruñó Clara
-Mi amor solo es una chaqueta, no nos pusimos de acuerdo- contestó Diego hartó
-No te creo!- gritó Clara
-Confía en mí, deberías de venir a comprobarlo- exclamó Diego calmado pues ya sabía como calmar a su novia
-Está bien te creo, más adelante te alcanzaré amor, quieres hacer una videollamada en tu cuarto conmigo? - preguntó Clara
-Me encantaría pero quedamos todos en ir a cenar- se disculpó Diego
-Bueno diviértete y ya sabes Diego, cuidado o si no habló- advirtió Clara
-Vale, descansa- finalizó la llamada
Los chicos cenaron todos juntos, Jorge bromeaba con Cande, Diego y Martina seguían con sus juegos de miradas, Facu estaba muy cariñoso con Alba, Samu disfrutaba de la compañía de Mercedes pues se habían vuelto muy buenos amigos. Se la estaban pasando tan bien que después de la cena Jorge, Facu y Diego entraron a la piscina a escondidas para grabar contenido para el canal de Jorge, Diego empezó a imitar a una foca y los tres chicos rieron como nunca.
Al día siguiente fueron a Baraquilla, durante el show hubo una lluvia pero aún así el público no se movió de sus lugares, pues estaban ansiosos de ver a los violettos, al día siguiente la lluvia continuaba, los chicos se tenían que ir al aeropuerto, durante el camino a éste se formó tráfico y las calles se inundaron.
Pepe, uno del staff, se tuvo que bajar para poder abrir camino y dirigirse al aeropuerto pues estaban apunto de perder el vuelo, en la camioneta los chicos festejaban a Pepe y Jorge alcanzó a grabar el acontecimiento.
Llegaron al aeropuerto aún estaba lloviendo, Diego miró la lluvia suspiró, Martina se encontraba en la entrada principal del aeropuerto pero Diego jaló su brazo.
-Que ocurre Diego? , nos tenemos que ir- exclamó Martina
-Necesito que me acompañes un segundo venga- contestó Diego tomando su mano y saliendo del aeropuerto
-Estás loco, nos estamos mojando!- gruñó Martina debajo de la lluvia
-Shh- Diego la silencio, tomó su rostro cuidadosamente y unió sus labios a los de ella.
Ambos se encontraban devorando sus labios lentamente debajo de la lluvia, disfrutando ese cálido sabor que en varios días no habían probado, sus lenguas se encontraron, ambos movían la cabeza lentamente. Martina depositó sus manos en el cuello de Diego, Diego no soltó el rostro de Martina, sus respiraciones se volvieron agitadas al igual que las palpitaciones de sus corazones, incluso ambos sentían palpitaciones por todo el cuerpo, sin embargo Martina rompió el beso algo molesta y con la cara rojiza debido a las sensaciones que había experimentado.
-Detente Diego somos amigos!- exclamó tratando de recuperar el aliento-No lo vuelvas a hacer- amenazó Martina intentando calmar su ritmo cardíaco y sus deseos, aún sin romper la distancia
-Lo siento pero tenías que ser tú, mi primer beso bajo la lluvia- susurró Diego recargando su frente con la de Martina

Say that you love me, novela Dietini (Completada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora