Good Luck // Maxley

15. Dudas

Bradley estaba molesto.

Molesto es poco, estaba furioso.

Golpeaba una y otra vez el pie contra el piso tratando de controlar su ira. Desde la fiesta de fin de semestre no volvió a ver a Max por ningún lado.

¿Acaso estaba huyendo de el?

Sentado en su escritorio trato de pensar en otra cosa y concentrarse en estudiar pero su mente no dejaba de divagar buscando algún tipo de respuesta sobre la ausencia del menor.

Resopló una vez más retirando sus anteojos, masajeo su sien tratando de calmar el ligero dolor en su cabeza. Decidió salir a dar un paseo antes de estallar en cólera y romper un sexto libro de trigonometría de la semana.

Si, tenía problemas de ira.

Con pesadez, bajo por las escaleras, tomo sus llaves y algo de dinero para enseguida salir sin rumbo y respirar algo de aire fresco.

Pasaron ya 7 días desde la fiesta y no logro encontrar a Max por ningún lugar.

Al inicio creyó que quizá el novato estaba algo avergonzado después de compartir un beso y lo entendió, luego llegó la inseguridad ¿Acaso no le gustó el beso? ¿Se molestó? ¿Se arrepiente? Mil preguntas más rondaban la mente de Bradley mientras trataba de encontrarlo en algún lugar al que frecuentaba con sus amigos. Nada, no lo encontró.

El miedo se transformó en ira en cuanto supuso que el menor estaba huyendo de el

Es un cobarde, pensó.

Definitivamente estaba escondiéndose

¿Cómo es posible que PJ y Bobby paseen por el campus en sus patinetas, vayan al café bar o a comer pizza todos los días sin la compañía de su mejor amigo? Obviamente se estaba escondiendo.

Nuevamente sintió la ira burbujeante atacar su cuerpo, apretó su mandíbula imaginando al pelinegro escondido en algún rincón del campus mientras se reía viendo al castaño buscarlo por todos lados.

-Ese imbécil- susurró sumergido en sus pensamientos- ¿Desaparecer después de besarme? Que creativo-

Dió vuelta a la esquina para cruzar el parque cercano a su cafetería favorita, el sol resplandecía causando que una gota de sudor caiga por su frente. Cruzó un par de árboles viendo a lo lejos su destino. Sin evitarlo, soltó un nuevo quejido.

-¡Agh!- gruño -juro que cuando lo encuentre le voy a arrancar las ...¿Emma?-

Detuvo su caminata cuando visualizo a la morena a pocos metros de él.

La mujer se encontraba sentada en una mesita de madera cubierta por una sombrilla blanca, sostenía un libro entre sus manos pero su mirada estaba perdida en algún lugar del parque.

Bradley se acercó suavemente al lugar colocando una sonrisa sincera en su rostro pues desde la fiesta tampoco tuvo mucho contacto con ella y ya la extrañaba.

-Hola Emma-

En cuanto escucho su nombre, pego un pequeño brinco en su propio sitio volteando para ver de quien se trataba, sus ojos se abrieron como platos al ver a Cremanata parado frente a ella, tomo sus cosas con torpeza y se levantó tratando de huir pero enseguida el mayor agarró su muñeca con delicadeza.

-Bradi yo...-

Bradley se sentó en la mesita soltando a la morena para que se acomode nuevamente en su sitio, la mujer suspiro sintiendo su rostro arder entendiendo que tendría que asumir toda la situación.

-¿Por qué intentas huir de mi?-

-Yo...me siento muy avergonzada contigo Bradi- murmuró bajando la mirada -siento mucho confundir las cosas-