Capítulo 29

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Louis estaba sentado en el sofá, con Noah dormido en sus brazos, mientras Zayn lo observaba con una mezcla de preocupación y cariño. Desde que Harry se había ido, Louis no había sido el mismo. Se aferraba a Noah como si fuera su ancla en un mar de confusión y culpa, y Zayn sabía que su amigo necesitaba un respiro, aunque fuera pequeño.

—Lou, no puedes seguir así —dijo Zayn con suavidad, sentándose a su lado—. Sabes que te quiero, pero necesitas despejarte un poco, salir de la casa y pensar en otra cosa por un rato.

Louis suspiró, mirando el rostro tranquilo de su hijo. —No sé si puedo, Zayn. Cada vez que trato de salir, me siento mal. Es como si estuviera abandonando a Noah... y luego pienso en Harry y todo lo que pasó, y solo quiero esconderme.

Zayn negó con la cabeza, decidido. —No te estás abandonando a ti ni a Noah por tomar un respiro, Lou. Tienes que pensar en ti también. Niall y yo estábamos hablando, y pensamos que podríamos hacer una salida de omegas, solo nosotros. Unas copas, una conversación ligera. Nada complicado, solo algo para despejarte.

Louis levantó la mirada, algo inseguro. —¿Salir? ¿De verdad crees que eso me ayudaría? No sé si quiero lidiar con más cosas ahora...

Antes de que pudiera decir algo más, Jay entró en la sala. Había estado escuchando desde la cocina, y sabía que su hijo necesitaba ese empujón. —Cariño, Zayn tiene razón. No puedes encerrarte en tus pensamientos todo el tiempo. Yo me encargo de Noah, y tú sales a divertirte un rato con tus amigos. Te va a hacer bien.

Louis miró a su mamá y luego a Zayn, sintiendo cómo una pequeña chispa de esperanza se encendía dentro de él. Quizás salir, aunque fuera solo por una noche, podría ayudarlo a pensar con más claridad.

—Está bien —dijo finalmente, un poco más animado—. Supongo que una noche con ustedes no me haría daño.Zayn sonrió, satisfecho de ver a Louis aceptar la idea. —Perfecto. Será algo sencillo, solo nosotros tres. Te prometo que te sentirás mejor después de unos tragos y buena compañía.Louis sonrió débilmente, agradecido por el apoyo de su amigo. Por primera vez en mucho tiempo, la idea de salir no se sentía tan pesada.

Zayn soltó una risa suave al ver que Louis aceptaba, aunque fuera con cierta duda. 

—Perfecto. Le diré a Niall que estamos listos para una noche tranquila. Nada de locuras, solo amigos y tragos.

Louis asintió, aún con Noah en brazos, y luego miró a Jay con una mezcla de agradecimiento y cansancio. —Gracias, mamá. No sé qué haría sin ti.

Jay le sonrió con ternura, acariciando la cabeza de su nieto.

 —Siempre estaré aquí para ayudarte, Louis. Además, te mereces un descanso. Haré que Noah tenga una noche tranquila mientras tú te relajas un poco.

Louis dejó que Jay tomara a Noah con delicadeza, y sintió cómo su pecho se tensaba por la mezcla de emociones. Sabía que no podía seguir refugiándose únicamente en su hijo para enfrentar su dolor. Era necesario enfrentar sus propios sentimientos, sus miedos y su culpa.Zayn se levantó y miró a Louis con complicidad.

 —Te paso a buscar en un par de horas. No te preocupes por nada. Solo ve y prepárate para disfrutar la noche.

Louis lo observó salir, luego se quedó unos minutos más en el sofá, intentando procesar la idea de estar fuera de la casa, sin Noah, sin ese constante recordatorio de lo que había perdido con Harry. Su mente regresaba a ese vacío, esa separación que le dolía cada día más. Sin embargo, la insistencia de sus amigos, especialmente de Zayn y Niall, le daba una pequeña esperanza de que quizás, solo quizás, una noche lejos de todo le ayudara a verlo todo con más claridad.

Whish you the bestDonde viven las historias. Descúbrelo ahora