Capítulo 8

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CAPÍTULO 08: Ecos de Ausencia

SASUKE

Otra noche sin conseguir dormir. Me sentía intranquilo, como si algo dentro de mí estuviera en constante lucha. Di vueltas en mi cama hasta que no lo soporté más y me levanté. La casa estaba en completo silencio, pero mi mente no podía dejar de trabajar, enfocada en una sola cosa: Akira.

Me dirigí a la cocina en busca de las píldoras relajantes que Sakura me había dado. Ya había tomado dos esa noche, pero aun así no podía dormir. Tomé una más y me quedé mirando la nota que había dejado en la encimera. Era un simple "Estoy viajando", pero sentía que detrás de esas palabras había algo más profundo.

¿Por qué no podía simplemente ignorar estos pensamientos? Siempre había estado solo, siempre había manejado mis emociones de una manera fría y distante. Pero desde que Akira llegó, algo dentro de mí había cambiado. ¿Era su poder ocular lo que me estaba afectando de esta manera? ¿O era algo más?

Orochimaru podría tener respuestas. "Las sombras del pasado encuentran eco en lugares inesperados", sus palabras resonaron en mi mente. Tenía que hablar con él, necesitaba saber si Akira me estaba manipulando sin que yo lo supiera. El reloj marcaba las cuatro de la mañana cuando escribí una nota rápida y salí de la casa, dirigiéndome hacia la cueva de Orochimaru.

La cueva de Orochimaru siempre había tenido una atmósfera densa y asfixiante, pero esta vez se sentía más opresiva que nunca. Los largos pasillos oscuros me llevaban cada vez más cerca de las respuestas que buscaba, aunque una parte de mí temía lo que encontraría.

Finalmente, llegué a la cámara principal, donde Orochimaru me esperaba con su habitual sonrisa enigmática.

Sasuke-kun —me saludó con una voz serpenteante—. Qué agradable sorpresa verte aquí. ¿Qué te trae de vuelta a mis dominios?

No perdí el tiempo con formalidades. Había venido a por respuestas.

Es Akira —dije directamente—. Su poder ocular... El Tenmeigan. Quiero saber si está influyendo en mí. Si ha hecho algo para... controlarme.

Orochimaru me observó en silencio durante unos segundos que se sintieron como una eternidad. Luego, su sonrisa se ensanchó, y sus ojos destellaron con esa mezcla de curiosidad y malicia que siempre había odiado.

Oh, Sasuke-kun... —dijo con un tono casi divertido—. ¿De verdad crees que Akira te está controlando?

Quiero saberlo —repliqué con frialdad, sin dejarme llevar por sus juegos.

Orochimaru se acercó lentamente, rodeándome como un depredador que acecha a su presa.

El Tenmeigan es un poder fascinante, eso no se puede negar. Pero no te equivoques, Sasuke. Akira puede influir en las mentes, puede sembrar emociones, crear ilusiones... pero lo que sientes en este momento, eso no es obra de su poder.

Lo miré fijamente, tratando de procesar sus palabras. ¿Qué quería decir?

Entonces, ¿qué es esto? —pregunté con el ceño fruncido—. Desde que llegó, las cosas no han sido lo mismo. Mi mente está dividida, confundida...

Orochimaru soltó una risa baja, casi como si estuviera disfrutando de mi confusión.

Sasuke, no todo lo que sientes es fruto de un jutsu o una manipulación. A veces, los sentimientos son mucho más simples... y mucho más complicados. Quizás estás empezando a descubrir algo que te incomoda porque va en contra de todo lo que creías. Pero eso no tiene nada que ver con el poder de Akira.

Eco de Sombras (Sasuke Uchiha)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora