Te voy a echar de menos (2º parte)

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- Y yo donde voy ahora- dijo Sunoo haciéndose el enojado.

- Ponte a mi lado- dijo Sunghoon mientras se echaba hacia un lado.

Sunoo no se esperaba esa respuesta en absoluto.

- ¿Qué pretendes?- respondió Sunoo mirándole con una sonrisa.

- ¿Yo?, nada- dijo mientras miraba hacia otro lado.

Sunoo se acercó a la cama y se sentó en el borde.

- Eres muy gracioso ¿no?- dijo Sunoo mientras le miraba atentamente.

- ¿Lo soy?- respondió dudando mientras se inclinaba para sentarse.

Sunoo solamente le dio un golpecito flojo en la pierna.

- Oye, ¿dónde vives?- le preguntó Sunghoon al recordar que no vivía ahí.

- Vivo en Madrid- dijo Sunoo mientras se imaginaba su casa en la cabeza.

- Pues estaría guay que te quedarás aquí para siempre- dijo Sunghoon mientras le sonreía.

- ¿Por qué dices eso?- preguntó Sunoo bastante curioso.

- Me gustaría tenerte cerca Sun, yo sería muy feliz, deberías aprovechar tus vacaciones a tope- dijo Sunghoon mientra se ponía un poco rojo.

En ese momento Sunoo recordó que volvía a su casa al día siguiente por la mañana. De repente el miedo y la tristeza se apoderaron de él por dentro. Empezó a pensar en cómo Sunghoon se tomaría todo esto y en cómo extrañaría a Sunghoon. Si le decía a Sunghoon que se iba al día siguiente, este se destruiría por dentro y no sería feliz. Sunoo comenzó a pensar en Sunghoon, en cómo le trataba y cómo le decía cosas lindas aunque a veces tuviese sus bromas. En realidad le resultaría muy difícil encontrar a alguien como Sunghoon, a alguien bueno, guapo, amable, protector, a alguien capaz de morir por ti, capaz de sufrir por ti, eso era lo que Sunghoon haría por Sunoo y a Sunoo le resultaría muy difícil olvidar a Sunghoon, sin duda, si no era con Sunghoon, él no querría continuar. Se imaginó cómo sería para él volver a casa y pensar que nunca más vería a Sunghoon en varios años, sí que se podría contactar con él, pero el pensar que este se olvidará de él con el paso del tiempo le destruyó el corazón en mil pedazos. El pensar que saldrá con una persona que no será él, el no pasar el resto de su vida junto a Sunghoon.

Sunoo antes de venir de vacaciones, se estableció una serie de normas, y la principal de todas era la de no enamorarse, la regla más prohibida y peligrosa que rompió, porque sabría que si llegaba a enamorarse, sufriría un montón al no tener cerca a esa persona. Siempre que Sunoo trataba borde a Sunghoon era para tratar de evitar que se enamorarse más aún de lo que ha estaba, aunque sabía que le estaba costando, lo de pensar mal de él, regañarle, insultarle, mirarle con odio, todo lo hacía para no caer a sus pies completamente, porque sabía que no sería muy difícil enamorarse de alguien cómo él.

Pero Sunoo tuvo la mala suerte de que se pilló bastante por Sunghoon, cuando no estaba con él, no quería admitir que le necesitaba aunque moría por estar con él, sufría en el interior y no se dejaba ver, cuando veía a Sunghoon en el parque de atracciones, en la playa, en la fiesta, Sunoo se alegraba un montón por dentro, cosa que él no quería, pero eso no lo podía evitar, trataba de mostrarse desagradable y maleducado con él, creyendo que podría dejar de gustarle, cuando Sunghoon le besaba sin permiso, eso era lo que más le gustaba, pero no era bueno para él, sabiendo cómo lo pasaría después.

- ¿Sunoo te encuentras bien?, ¿necesitas algo?- dijo Sunghoon al verle mirando un punto fijo sin moverse, con una expresión de tristeza.

Sunghoon te amo.

Quédate conmigo - sungsun/sunsunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora