POV Francisco
Esteban y yo prácticamente vivíamos juntos en mi nuevo departamento.
Él se había encargado con mucho disimulo de amueblarlo y comprarle todo lo que necesitaba; la verdad es que al principio me molestaba, pero después simplemente lo acepté, después de todo era el departamento de los dos.Cada mañana desayunabamos juntos.
luego él me dejaba en la cafetería, asegurandose de que entre a horario, y luego se iba a la oficina. me gustaba fantasear con que esa era nuestra vida,nuestra rutina, me gustaba pensar que era para siempre.Aquella mañana la cafetería estaba tranquila, no entraba mucha gente.
Cuándo la campanilla de la puerta sonó levanté la vista y fue mucha mi sorpresa al ver a Matias entrar.Caminó hasta donde estaba y me saludó
-¿podemos hablar?-se animó a decir después de darle vueltas al asunto
-no
-por favor
-estoy trabajando
-es importante
suspire y le pregunté a mi compañera si podía cubrirme unos minutos.
Llevé a Mati a la calle y encendí un cigarrillo-bueno que sea rápido, esa tarada se hace la amable pero después...
-es sobre Esteban...
-no-dije tirando el cigarrillo, no iba a escuchar un solo segundo de Matias hablando mal de Esteban-no vas a hablar de él
-por favor...
-¿que es lo que te pasa? ¿es envidia? ¿celos? ¿te gusto? ¿te gusta él? ¿ o solo sos asi porque...
-lo vi con una mujer, fue a cenar con ella y dos viejos al restaurante dónde trabajo
-dios mio, debes ser la persona más triste del mundo
-te lo juro
-debe ser la hermana
-no creo...
-tengo que volver, acercate a mi cuando decidas ser una persona normal
-sabia que no me ibas a creer, asi que le saque fotos
En las fotos del celular de Matias se podia ver a Esteban con sus padres y una chica que claramente no era su hermana.
sin embargo no me preocupó, podía ser cualquier persona-puede ser cualquiera...
-entraron de la mano, ella lo abrazaba y se besaron
-¿seguro?
-yo no te odio, para mi si somos amigos y no quiero que este tipo se ría de vos
-no lo entiendo-murmure. le había pedido en muchas ocasiones que dejara de mentirme,que me dijera lo que sea
-seguro no es una novia, Fran,debe ser como lo de Delfi, habla con él
-es un estúpido si es asi, le dije que me cuente...gracias-le dije. Matias era una persona colerica y extraña, pero también era mi amigo desde siempre y sabía que solo intentaba cuidarme
-Francisco
lo miré, en el fondo no podía evitar pensar en lo que acababa de ver y escuchar
-no me cae bien, y vos y yo tenemos nuestras diferencias, pero si este tipo te hace sufrir yo lo voy a matar
-seguramente sea solo para tener al padre contento, me molesta muchísimo pero no creo que sea gran cosa
-espero que no, porque lo voy a matar si te hace llorar de nuevo
lo abracé y nos despedimos, en realidad extrañaba bastante a Mati.
Volví al trabajo repasando mentalmente en las cosas que quería decirle a Esteban esa noche, tendríamos una cena terrible.
●●●
Esteban llegó más tarde de lo usual aquélla noche y parecía muy cansado.
me saludó con un beso breve y dijo que estaba muerto, que iría directo a la cama-de hecho quería hablar de algo-le dije sentado en el sillón
-¿no puede ser mañana? te prometo que mañana soy todo oídos
-¿con quién fuiste a cenar el otro día? ¿tus padres y quién más?
Noté como sus ojos perdieron el cansancio en cuestión de segundos
-¿que?
no me anduve con rodeos y le dije parte por parte lo que Matias me había contado
-parece que para tu desgracia mis amigos andan en todas partes
Él apretó su nuca y se sentó junto a mí
-Fran...
-mira,yo ya sé lo que pasa acá...no me gusta que me mientas,ya no sé como decírtelo
-yo...
-me lo tenías que decir, me haces sentir un idiota...¿quién es? ¿le pagas? ¿o es una amiga?
-Fran...no es lo que pensas
-es mucho peor-le dije riendo. no estaba enojado, ya no, había aprendido a dejar de preocuparme en cosas innecesarias.
pero él no río,parecía serio y oscuro, apagado.
se sacó los lentes y presionó un poco su tabique-Sol, asi se llama...y me voy a casar con ella
la unión entre sus palabras y mi entendimiento de ellas era lenta y débil, no entendía, solo pude reírme
-¿que?
-el...el sábado-tartamudeo. noté que sus manos temblaban asi que las miré. tenía puesto el anillo de plástico que le había dado.
-no es gracioso
-no lo es
-¿estás loco? ¿porque estas diciendo eso?
-es un matrimonio arreglado, no pude evitarlo, no pude...
-¿estas hablando en serio? ¿esto es real?
-Fran...
-no puede ser real ¿no? es...quiero decir,no va pasar eso
-no sé que hacer-me dijo mirandome por primera vez. estaba llorando
todo ante mi vista se volvió borroso.
tenía una fuerte presión en el pecho y unas repentinas ganas de llorar-eh...-ni siquiera sabia que decir, mis palabras se mezclaban
-tal vez pueda hacerlo y seguir viéndote, va a ser casi lo mismo, nada va a cambiar...
-andate
-Fran
-andate y no vuelvas, me voy a ir de tu departamento y no vas a saber más nada de mí
-mi amor, por favor...
-¡no me digas asi! ¡yo no soy tu amor! ¡vos no sabes un carajo del amor!
-Francisco, entendeme...
-¡yo era feliz sin vos! era más pobre que la mierda, pero era feliz, y vos me cagaste la vida-le grité. a esa altura ya lloraba y necesitaba alejarme de él, el dolor era intenso,más fuerte que cualquier otro dolor físico.
me puse de pie y caminé hacia atrás golpeando mi cintura con la mesa
-Fran, por favor...
-te entregue mi corazón y me lo hiciste mierda...sos una mierda y conocerte fue lo peor que pude haber hecho
-para, por favor, nos estamos lastimando
-la diferencia-dije secando mis lagrimas con violencia-es que yo voy a dejar de lastimarte en cuánto te vayas y no me escuches más, vos a mí me vas a lastimar para siempre
-perdoname, sé que no lo merezco pero...
-por favor, Esteban, si me amas, si me amaste alguna vez, andate
Se fue sin voltear a mirarme y en cuanto la puerta se cerró me derrumbe.
nunca había amado a nadie como a él, y nunca nadie me había lastimado tanto.