Extra 2

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El aire en la casa se había vuelto pesado, sofocante, casi tangible. Había algo en el ambiente, un cambio imperceptible pero evidente que se sentía en los cuerpos de todos los presentes. Los alfas se movían con inquietud, los betas no podían ocultar su nerviosismo, y en el fondo de sus mentes, todos sabían que algo estaba a punto de desatarse. Pero nadie se atrevía a mencionar lo obvio.

Hyunjin llevaba días comportándose extraño. Su humor se había vuelto volátil, los gruñidos y miradas de advertencia hacia cualquiera que se acercara demasiado se habían vuelto cada vez más frecuentes. Minho fue el primero en notarlo. Estaba sentado en la sala con Christopher, cuando sintió el primer rastro de feromonas en el aire, un aroma denso que llenaba sus pulmones como una advertencia.

—¿Lo hueles? —Minho frunció el ceño, entrelazando los dedos con nerviosismo.

Christopher asintió, su mandíbula tensa.

—Está cerca... demasiado cerca.

ChangBin entró en la sala, su presencia imponente, y aunque intentaba mantener la calma, no podía evitar verse inquieto.

—No ha pasado tanto desde su último celo —comentó mientras cruzaba los brazos, sus ojos escudriñando el espacio como si esperara que Hyunjin apareciera de repente, descontrolado—. Pero esto... esto es diferente.

—Han pasado siete meses —corrigió Minho, su tono cargado de una mezcla de preocupación y tensión—. El último celo fue justo antes de que supiéramos lo de Felix. Y ya deberíamos haberlo visto venir.

Christopher resopló, pasándose una mano por el cabello.

—Nadie puede predecir cuándo va a pasar exactamente, pero esto... esto huele a problemas. Y si entra en celo ahora, con todos nosotros aquí, las cosas podrían ponerse muy feas.

La palabra "celo" no era algo que se mencionara a la ligera, especialmente cuando se trataba de un alfa como Hyunjin. Todos sabían lo que implicaba: su lobo interno tomaba control, cegado por el deseo y la necesidad de marcar y poseer a su omega. El problema era que nadie sabía si Hyunjin veía a Felix de esa manera. Y ese pequeño detalle podría significar la diferencia entre el caos absoluto o un simple desafío.

—¿Qué vamos a hacer? —preguntó SeungMin, rompiendo el silencio incómodo. El beta había estado inquieto desde que el aroma empezó a filtrarse por la casa—. Si su lobo lo toma por completo… no sé si podremos detenerlo.

—No podemos dejar que SungHoon esté cerca cuando eso pase —respondió Minho, tomando el control de la situación—. Su instinto será proteger al cachorro... o destruir todo lo que esté cerca si siente que está en peligro.

ChangBin asintió, aunque su mandíbula seguía tensa. Era un alfa poderoso, pero sabía que enfrentarse a otro alfa en celo no era un asunto sencillo. Hyunjin no solo era peligroso en estado normal, su lobo era uno de los más feroces.

—Llevemos al bebé al cuarto de abajo —sugirió JeongIn—. Podemos cuidarlo nosotros mientras esto pasa. Y si Felix no llega pronto...

—No podemos dejar a Felix cerca de Hyunjin hasta que estemos seguros de que su lobo lo quiere —interrumpió Christopher con voz grave—. Si su lobo no lo reconoce como su omega... —Hizo una pausa, sus ojos oscuros y preocupados—. Podría terminar muy mal.

Minho se frotó el puente de la nariz, tratando de aliviar la tensión que comenzaba a acumularse en su cabeza.

—Aún no sabemos si Hyunjin realmente lo acepta —murmuró—. No sabemos si su lobo ha tomado la decisión.

ChangBin asintió de nuevo, su voz baja pero cargada de seriedad.

—Lo sabremos pronto.

Y ese "pronto" llegó antes de lo esperado.

Omega's Surprise // HyunLixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora