Omega's Surprise // HyunLix

11

Los días pasaron lentamente, la atmósfera en la casa se volvía cada vez más tensa. HyunJin se esforzaba por mantener la calma, pero la frustración lo consumía. Ver a Felix buscar consuelo en ChangBin solo lo hacía sentir más perdido. Cada vez que los veía juntos, su pecho se apretaba, una mezcla de celos y confusión. Sin embargo, trataba de no actuar de forma irracional, sabiendo que cualquier altercado podría afectar aún más a Felix y al bebé.

Una tarde, HyunJin los encontró riendo en la cocina, y aunque intentó no mostrarlo, algo en su interior se quebró.

—Voy a salir un rato —dijo con voz tensa, sin siquiera mirarlos.

Felix levantó la mirada, sorprendido por el tono de HyunJin, pero no dijo nada. Sabía que HyunJin estaba lidiando con sus propios demonios, pero no podía evitar sentir que estaba siendo rechazado nuevamente.

En otro lugar, JeongIn y Minho habían comenzado a investigar lo que realmente había sucedido con Felix. Sabían que había algo extraño en todo esto. Felix nunca había mostrado síntomas de ser un Omega, y la idea de un embarazo había sido un shock para todos. Revisaron los registros médicos de la empresa, buscando cualquier pista, pero todo parecía en orden, al menos en la superficie.

—Esto no tiene sentido —murmuró Minho mientras revisaba los informes.

—Algo debió salir mal —respondió JeongIn—. Tal vez la inseminación fue un error, pero no podemos probar nada aún.

Mientras tanto, en la casa, Felix comenzó a sentirse cada vez peor. El estrés de la situación, la distancia de HyunJin, y la incertidumbre sobre el bebé lo estaban afectando profundamente. Una noche, después de que HyunJin regresara de uno de sus paseos solitarios, encontró a Felix sentado en el borde de la cama, con las manos en el vientre.

—Felix, ¿estás bien? —preguntó HyunJin, acercándose con preocupación.

—No lo sé... —respondió Felix, su voz temblando—. Me siento mal, HyunJin. Todo esto... todo el estrés... no sé cuánto más puedo soportar.

HyunJin sintió una oleada de pánico. Se arrodilló frente a Felix, tomando sus manos.

—No te preocupes, Felix. Estoy aquí. Lo siento... lo siento mucho por no haber estado a tu lado como debería.

Las palabras de HyunJin, aunque bien intencionadas, solo incrementaron la tensión emocional en la habitación. Felix, sintiéndose más vulnerable que nunca, comenzó a llorar silenciosamente.

Al día siguiente, ChangBin y SeungMin lo llevaron al hospital para asegurarse de que todo estuviera bien con el embarazo. Mientras esperaban, HyunJin no dejaba de caminar de un lado a otro en la sala de espera, su mente un torbellino de pensamientos.

Finalmente, el médico salió y les informó que el bebé estaba bien, pero que Felix necesitaba descansar y evitar el estrés a toda costa.

—Si esto continúa, podríamos tener complicaciones graves —advirtió el doctor.

Mientras tanto, la investigación de JeongIn y Minho finalmente empezó a dar frutos. Encontraron una discrepancia en los informes del día en que Felix había tenido su cita médica. Había una nota en los archivos que indicaba que la inseminación estaba programada para otra persona, pero los nombres habían sido intercambiados por error.

—Esto es serio —dijo JeongIn, mirando a Minho con ojos muy abiertos—. Esto significa que el embarazo de Felix fue un error médico.

—¿Y si... —comenzó Minho, su voz bajando un tono—. ¿Y si el donante de esperma fuera alguien que conocemos?

El peso de sus palabras cayó sobre ellos como una losa, y ambos sabían que no podían seguir investigando sin causar más caos en la situación.

Esa noche, HyunJin entró en la habitación de Felix. Lo encontró dormido, con la respiración aún agitada por el llanto. Sin poder contenerse, se sentó junto a él y le acarició el cabello.