ENGAÑO

capítulo 26

Miércoles

-¡No puedes atraparme!

-¡Claro que puedo, mírame!

Ambas niñas corrían de un lado a otro, entre
risas y diversión.

Becky envidiaba aquello.

Las miraba correr de un lado a otro y reírse,
hacerse caras graciosas y abrazarse de vez en
cuando. Las había visto jugar fútbol hace un
rato, también a las escondidas.

Becky quería volver a ser una niña, volver a
esa época donde su máxima preocupación era
jugar con sus amigas y ordenar su habitación.

Miró a Lisa , y la encontró observando a las
niñas también. Tenía una media sonrisa, y
reía cuando las niñas lo hacían.

-Me recuerda a nosotras- Dijo de pronto
-Cuando salíamos a jugar y regresábamos
sucias a casa- Lisa  rió, contagiando a becky.

-Mamá siempre se reía al vernos- Agregó
Becky -Luego nos mandaba a limpiar nuestras manos y nos daba galetas.

-Sí, o a veces mi mamá preparaba pasteles y
comíamos toda la tarde- Lisa  volvió a reir
-O cuando nos quedábamos toda la noche
jugando vídeo juegos.

Ambas rieron, recordando esos momentos.

-Recuerdo que una vez que mis padres
salieron, tú te quedaste a dormir en mi

casa-  becky apoyó su mano en su barbilla,
recordando mejor -Nos quedamos con Irene
despiertas toda la noche, incluso la hicimos
ocinarnos algo a las dos de la mañana.

-Verdad, incluso al rato después llegó Seulgi
con dos pizzas- Lisa  recordó -Estuvimos toda
la noche jugandoy comiendo. Fue divertido.

-¿Qué fue divertido?- Irene se sentó al lado de Becky bajo el árbol, sosteniendo un helado.

-Recordábamos cosas del pasado, como
aquella vez que las cuatro nos quedamos en
casa jugando y comiendo toda la noche- becky  le sonrió -Y que Seulgi llegó con pizzas a las dos de la mañana.

-Yo recuerdo- Irene legó y se sentó al lado de
Seulgi -No me dejaron ir y me escapé de casa,
mientras caminaba vi una pizzería abierta y
compré algunas, luego me uní a ustedes.

¿Te escapaste?- Irene la miró -Nunca me
Contaste eso.

-Es que si te contaba que me escapé para
verte, de seguro me regañabas- Seulgi
se encogió de hombros -Eras muy sobre
protectora con nosotras.

-Y lo sigo siendo- Irene rió -Como la mayor del grupo, debo protegerlas y cuidarlas, además de alimentarlas bien y subirles el ánimo. La mejor parte es la de la alimentación.

-Te gusta hacernos engordar, admítelo-  becky  rió -Llevo tres días aquí y te aseguro que ya he subido diez kilos con todo lo que cocinas.

-Al final de la semana las cuatro terminaremos siendo bolitas, y en vez de caminar vamos a rodar- Seulgi fue la primera en reir, seguida por las otras dos.

-Es un buen plan- Irene hablaba entre risas.

Becky reía, sintiéndose feliz.

Aunque sabía que el sentimiento era
momentáneo.

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-Voy a empezar a contar.

Irene se dio la vuelta, cerrando sus ojos.

Las tres restantes corrieron en todas
direcciones.

Por que sí, cuando Irene mencionó que
podrían jugar a las escondidas, las cuatro
estuvieron de acuerdo.