CAP 38

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⚠️CHAESOO⚠️
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POV JISOO

Me encontraba en la cafetería cuando todo se fue al diablo. Estaba a punto de dejar la comida que le traje a Rose en la mesa, cuando vi a Leo ir directo hacia Kai como un tren desbocado. Sabía que algo malo iba a pasar. De inmediato dejé los platos y corrí tras él, pero ya era tarde. Leo estaba fuera de control.

Primero intenté detenerlo, pero el puñetazo ya había aterrizado en la cara de Kai. No era cualquier golpe; vi la furia en los ojos de Leo, y eso me dio miedo. Si no lo separábamos, iba a seguir golpeando hasta que no quedara nada de Kai. Los chicos hicieron lo mismo, Seulgi y Wendy lo agarraron por los brazos mientras Jeongyeon y Winter se interpusieron entre ellos.

El ambiente en la cafetería quedó cargado de tensión cuando Jennie se llevó a Leo a un lugar privado. Ambos estaban demasiado enojados, y sinceramente no me extrañaría que allá donde fueran las cosas empeoraran. Mientras tanto, Kai quedó en el centro de todo, como si fuera una especie de héroe caído, y ahí fue cuando noté algo que me molestó mucho más de lo que esperaba.

Nuestras novias, todas ellas, estaban más preocupadas por Kai que por lo que acababa de suceder con nosotros. Karina, Rose, Nayeon, Yeri e Irene se acercaron a Kai casi al mismo tiempo, preguntándole con voces llenas de preocupación:

-¿Estás bien? -le preguntó Karina, con una mano en su brazo.

-¿Dónde te pegó? -dijo Rose, sus ojos examinando su rostro.

-¿Te duele mucho? -le preguntó Yeri, casi tocando el rasguño que Leo había dejado.

Irene y Nayeon no dijeron nada, pero también estaban ahí, revisando su cara como si él fuera la víctima en todo esto. ¿Y nosotros? ¿Qué, acaso ya no existíamos? Estábamos ahí, de pie como idiotas, viendo cómo nuestras novias se preocupaban más por un tipo al que ni siquiera conocen tanto. Apenas lleva dos días en la escuela, y de repente es el centro de atención.

Eso fue lo que me hizo hervir de rabia.

-Rose -le dije, jalándola del brazo para que dejara de tocar a Kai-, deja de revisarlo. No le pasó nada.

-Solo estoy viendo si está bien -me respondió, con esa voz tranquila que me enfureció aún más.

-¡Sí, claro! Sigue revisándolo, entonces -le espeté, soltando su brazo-Yo me largo de aquí.

No podía soportar más esa escena. Mientras salía furioso de la cafetería, vi cómo los chicos también estaban molestos, pero igual de atónitos al ver a sus novias alrededor de Kai. Ninguno dijo nada, pero sus miradas lo decían todo. Compartíamos el mismo sentimiento.

Salí de la cafetería solo, dejando atrás a los chicos que seguían con la mirada fija en sus novias, todas preocupadas por Kai. Caminé rápido, las manos metidas en los bolsillos de mi chaqueta, buscando un cigarro para calmarme. Necesitaba despejarme, y fumar era lo único que me venía a la mente lo había dejado por qué Rose me lo había pedido recién iniciamos la relación pero no podía olvidar todo este lío sin fumar. Escuché pasos detrás de mí, y luego la voz de Rose llamándome.

-¡Jisoo, espera!

La ignoré. Estaba demasiado enfadado para hablar con ella. Seguí caminando hacia el estacionamiento, apretando el paquete de cigarrillos en mi mano. Todo lo que quería era un maldito momento de paz. Llegué al estacionamiento, saqué un cigarro y lo llevé a mis labios. Cuando estaba a punto de encenderlo, sentí unos brazos rodeándome por la espalda. No necesitaba voltear para saber quién era. Sabía que era Rose.

Tóxica -Jenlim - Jenlisa -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora