Heavy Blood

11

La princesa después de lo ocurrido se fue junto a su tío a sus aposentos ordenandole a su guardia que no permitiera que entrara nadie, cuando dió la orden soltó a su tío y se aventó a la cama con la cara entre las almohadas.

Aemond sin entender que hacer se quedó mirándola apretando los puños molesto por la broma recién hecha, pero de repente su molestia solo incremento cuando escucho el sollozo de su sobrina y como sus sollozos se hacian mas fuertes.

Olvidando su propio dolor decidio acercarse y sentarse junto a ella, pero sin saber que hacer, cuando el lloraba se encerraba y ya habia pasado demasiado tiempo de eso, pero Aelynor era totalmente distinta a el, era alguien amable, que siempre caminaba dando risas a cualquiera mostrando sus dientes que parecian perlas , siempre hablando sobre lo que creía que a él le llamaria la atención, intentando que riera.

Ella era más que lo que cualquier podría llegar a ser y verla así; llorando entre las almohadas, dolida por lo que los idiotas creyeron sería gracioso. Sin saber que más hacer sostuvo el cabello con una mano intentando sostenerlo todo para que no estorbara y lo hizo a un lado, ella seguia llorando asi que sobo su cabeza mostrando su apoyo.

—No entiendo porque lo hicieron— dijo entre hipidos — no les hicimos nada.

Escuchar eso le movió algo que jamás se había movido, ni siquiera cuando su madre lloraba sentía eso, talvez porque su madre era una mujer y sabía las consecuencias de sus actos. Pero Aelynor era una niña, incluso más inocente que su hermana.

—No es tu culpa—dijo sin saber que más decir—solo son idiotas llamando la atención.

La princesa lo vio y le dió una sonrisa, incluso con la cara un poco roja y mojada por las lágrimas recién derramadas ante sus ojos era la más hermosa de todas, movió su mano de su cabeza hasta sus cachetes limpiando las lagrimas que seguian cayendo. La princesa al sentir su mano se recargo en ella mostrando que le gustaba el contacto.

El príncipe se puso un poco nervioso, siempre había escuchado de su abuelo Otto hacia su madre que debían buscarle una esposa rápido con una casa fuerte pero el no quería una esposa, el queria a Aelynor ademas no había casa más poderosa que la Targaryen y la Velaryon.

La princesa acercó su brazo a su otra mano y lo jalo de este para lograr que se acercara a ella, el príncipe aun cohibido por todos los sentimientos se dejo ser y se sento en el colchón aun viendola fijamente. La princesa lo jalo aún más queriendo que se acostara a su lado, y aunque ya habían compartido cama aún no se acostumbraba al sentimiento.

Pero dejando ser a su sobrina se acostó de lado quedando frente a ella. Ella le devolvia la mirada aún sonriendo con los ojos cristalizados. Ella se veía hermosa ante sus ojos, la niña más linda de todas, y para ella el se veía especial, su cabello largo más claro que el de ella cayendole como cascada y con sus ojos llenos de comprensividad y cariño hacia ella.