SUN - Casi Ángeles

18 - DESAMORES

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Me fui al jardín para ordenar el desastre que había causado buscando las flores marchitas.

—Jessica, ¿podemos hablar? —dijo Josh, detrás de mí.

—No —respondí sin mirarlo.

—Por favor, Jessica —insistió.

-¿Qué querés, Josh? -dije levantándome y mirándolo seria.

-Quiero saber por qué actuaste así -me preguntó, confundido.

-Ja, ¿por qué? -dije fingiendo una risa-. Actué así porque ayer escuchaste algo que dijo Caridad, y de repente armaste ese caminito de flores para pedirme una oportunidad. Todo porque sabías que iba a elegir a Simón antes que a vos, solo por unos malditos celos -le expliqué, cruzándome de brazos.

—Ok, lo admito, lo hice por eso, pero vos sabías que iba a hacer algo para pedirte una oportunidad —dijo Josh, un poco avergonzado.

—Bueno, gracias por admitirlo —respondí, sarcástica.

—Y te conozco, sé que no solo te enojaste por eso —me dijo, insistente.

—Solo fue por eso —repetí, esquivando su mirada.

—Jessica, te conozco demasiado bien. Te enojaste peor cuando te enteraste de que tu papá se iba a casar con Malvina, o cuando te dijeron que ibas a vivir en la Fundación BB —dijo Josh, recordándome esos momentos.

—Odio lo bien que me conocés —murmuré, bajando la cabeza—. Está bien,

-Está bien, ok, hay algo más que me tiene enojada -admití, suspirando.

—¿Qué es? —preguntó Josh, curioso.

—Le dijiste a Simón que te di una nueva oportunidad —le acusé.

—Yo no le dije nada. ¿Por qué creés que fui yo? —respondió Josh, visiblemente confundido.

—Porque éramos los únicos ahí —dije, soltando una risa sarcástica.

—Incorrecto. Lleca estaba ahí y lo vio todo —aclaró Josh.

—Pero él no es buchón —contesté, frunciendo el ceño.

—Tranquila, yo no le dije nada a Simón. Después de que te fuiste, él nos vio desde atrás de los arbustos. Intenté explicarle, pero no me dejó —me explicó Josh, con sinceridad.

—Entonces, lo está suponiendo todo —murmuré, pensativa.

—¿Qué dijiste? —preguntó Josh.

—Nada, me tengo que ir a la clase de Feli —respondí, y salí corriendo hacia la sala de ensayo.

Al llegar, ya estaban cantando, así que me uní a ellas justo cuando Feli paraba la música.

—¿Terminó? —preguntó Caridad.

—¡No! ¡Ni arrancó! ¿Qué es eso de meetcha, meetcha? —dijo Feli, frustrada, caminando a nuestro alrededor—. No, chicas, esto no es Mary Poppins, ¡es Blondie! Es una mujer poderosa, oscura, de los ochentas —nos explicó mientras seguía caminando detrás de nosotras, que mirábamos al frente.

—¿No escuchan lo que dice? "De una u otra manera, vas a ser mía, te voy a conseguir, I'm gonna getcha", como diría mi prima —dijo Feli, riendo, y todas nos reímos también por su chiste. —A ver, empecemos desde cero. Lo que necesitamos es un poco más de actitud, más perras. ¿Les gusta la idea? —nos animó, con una sonrisa cómplice.