Lujuria || Railo || + Temp 2 || PAUSADA

Capitulo 22: Versatilidad -Parte 1-

—Pov Alo—

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—

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R-Eso haremos...

Todos mis sentidos se activaron y rápidamente capte cada movimiento mío haciendo que calentara todo mi cuerpo.

Por fin después de casi un mes logramos volver a llevar esto con más tranquilidad y lograr esta escena tan erótica de nuevo. De ser algo diario a sentirse como la primera vez. Literalmente me sentía como una recién enamorada cada vez que la rizada tocaba mi cuerpo. En este momento no sabía si ser dominante o pasiva pero jugar con ambos roles no estaba nada mal.

Con ferocidad bese su boca mezclando sensaciones únicas e inolvidables como la primera vez, sus labios encajaban perfectamente con los míos y su lengua no se quedaba atrás. Todo era una mezcla de sensualismo y desesperación.

La boca de Rai y la mía parecían no querer despegarse por lo que rápidamente sentimos la falta de oxígeno haciendonos gemir ahogadamente entre nuestras bocas sin ningún tipo de vergüenza al querer buscar un bocado de aire.

Fue tanto la duración del beso que nos separamos bruscamente en la necesidad del oxígeno. Sus ojos brillaban y sus mejillas estaban rojas con demasiada intensidad. Sentí mi piel erizarse al sentir sus emociones y sensaciones calientes y atrevidas que saqué mi lengua pasandola por todo su cuello. Sus suspiros me volvían loca y su cabeza se fué directamente hacía arriba dandome más acceso.

Combiné mis lamidas con besos profundos dejando posibles marcas y una zona rojiza fácilmente.

A-Eres hermosa Rai, hermosa...-Dije contra su cuello-

Con atrevimiento subí mi mano y sacando mi cara del cuello de la rizada para colocar dos dedos alrededor de sus labios, tocandolos y sintiendo su saliva.

A-Chupalos... -Solte totalmente exitada-

Rai solo sonrió y metió mis dedos a su boca rodeandolos con su lengua, dejandolos llenos de su saliva. Era tan sensual esta escena que por porco y perdía la cordura pero aún me contuve.

Saqué mis dedos y con la mano libre que tenía antes desabroché la falda negra de cuero que tenía Rai para rápidamente bajar los dedos llenos de saliva hacía su clítoris. Masajee de arriba a abajo, izquierda y derecha repetidas veces escuchando cada jadeo y bajo gemido que brindaba la rizada.

Bese nuevamente sus labios carnosos pero con más intensidad, abrí la boca para dejar entrar mi lengua dejando su boca casi seca. Estaba siendo muy exquisito este momento y quería disfrutarlo.

Baje más mis dedos ya sintiendo el centro de Rai bastante mojado logrando pasar mis dedos con total libertad sobre sus pliegues y empapandolos con su liquido preseminal.

Con delicadeza saqué mis dedos y los lleve a mi boca probando cada líquido con mi lengua, luego se los llevé hacía a Rai haciendo que chupara una mezcla de sabores.

A-¿Rico?

Rai río.

R-Grosera...

A-Si... -Dije al quitar la blusa abotonada de Rai-

Baje mi cabeza hacía su clavícula pasando solo la lengua por toda la zona. Pase por su cuello, pecho y con un movimiento rápido desabroché su sostén dejando a la vista sus hermosos pechos.

Amase uno y con la punta de mi lengua pase por el pezón que tenía al frente. Quería ser muy delicada ya que sabía que la hacía más sensible por su piel erizada y su cuerpo tensarse levemente.