Capítulo 5. Let it burn.

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Presente. Junio 2025

POV Lisa.

—No sabemos los daños que el trauma ha provocado, Jennie no responde a ningún estímulo— siguió hablando el doctor al ver que el shock inicial había pasado en nosotros.

Traumatismo Craneoencefálico severo.

No entendía nada de lo que el médico decía, solo entendía que Jennie me había dejado sola. Jennie estaba viva, viva pero no reaccionaba.

—Pero Jennie vivirá, ¿cierto? Mi niña es muy fuerte, ella ya ha sobrevivido a esto antes. Estoy segura de que despertará pronto.— preguntó Jia con desesperación, la esperanza en ella aún no había muerto.

—Está en coma, lo que significa que no responde y no está consciente en este momento. Estamos monitoreando sus signos vitales y brindándole el tratamiento necesario, pero no podemos predecir cuándo o si despertará.

Finalizó por fin, en su cara se notaba la compasión a nosotras. La madre de Jennie no soltaba mi mano, las lágrimas adornaban su rostro, este también deformado por las expresiones de dolor.

Podría apostar a que el mío estaba en el mismo estado. Las lágrimas no habían dejado de fluir. En coma, Jennie estaba en coma.

El último pedazo de mi corazón comenzó a desvanecerse y no quedó ningún rastro. Nada, no había nada, Jennie se había llevado todo consigo.

Trataba de no derrumbarme con Jia aquí, ella también estaba tratando de ser fuerte para mí, nos estábamos dando fuerza mutuamente.

—¿Puedo verla?—fue la primera frase que salió de mi garganta. Me escuchaba ronca, derrotada. Jennie era mi vida, Jennie era mi todo. Solo quería verla, quería sentirla.

—En un rato podrán pasar a verla. Solo familiares.— afirmó viéndome con curiosidad.

—Es mi otra hija, ¿puede pasar conmigo?

—Sí, de acuerdo, solo podrán pasar una por una. En unos minutos vendrá una enfermera por ustedes.

El doctor se retiró, dejando con nosotras una nueva carga, una nueva preocupación.

Sentí cómo unos brazos me rodeaban. Me aferré a su cuerpo, tratando de sentir en ella algún tipo de rastro de Jennie.

—Todo va a estar bien, Lisa. Jennie lo va a hacer bien y pronto estará de nuevo con nosotras.

No tenía respuesta a eso, su mano estaba dando confort en mi espalda, llevándola de arriba hacia abajo.

Ella no lo sabía, no sabía nada, no sabía si Jennie iba a estar bien. Yo no lo sabía.

—Estoy segura de que todo va a estar bien, Jia.

Recargo un momento su cabeza en mi hombro y dejó soltar un suspiro largo y entrecortado, evidenciando aún su llanto.

Una mentira piadosa que ambas nos estábamos diciendo, una mentira que esperábamos con todas nuestras fuerzas que se hiciera realidad.

Pronto llegó una enfermera con nosotros. Nos llevó a un cuarto en donde nos hizo limpiar nos y ponernos una especie de batas desechables color azul.

Una vez listas, nos llevó al área de la UCI. El pasillo era amplio, blanco, no había nada más que blanco, las baldosas, las paredes, las puertas.

Los cristales que apuntaban a las habitaciones no hacían más que reflejarlo.

Después de pasar algunos cuartos, la enfermera se detuvo. No hacía falta que nos dijera cuál habitación era, la estábamos viendo.

Mi alma escapó de mi cuerpo por unos segundos y el sentimiento de pérdida creció exponencialmente.

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⏰ Última actualización: Sep 26 ⏰

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