Capitulo VIII

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Gianna

Luego de el día que pasamos con la italiana en el barco me junte con el representante de la galería para cenar recibir mi pago y conversar de nuestro siguiente proyecto.

Recibieron muy buenos halagos por mis fotos, estaba más que impresionada a decir verdad, no los creí buenos y me sorprendieron.

Ahora el nuevo trato es 15.000 por cada cuadro y debo presentar al menos dos. Uno de ellos será la foto que tomé hace un par de días al golden en París y la otra alguna que le tome a la italiana mientras admirabamos el atardecer.

Hasta ese día aguanto mi batería social luego de eso se me acabo la pila.

Me encerré en el hotel y pedí servicio a la habitación para comer, aunque solo lo hice unas tres veces. Puede ser por eso que estuve durmiendo de más.

También esta el miedo a que no les agrade lo que voy a presentar mañana y que nadie compre los cuadros.

¿Y si deciden que no soy lo suficientemente buena como para volver a trabajar conmigo? O peor ¿Si me rechazan antes de presentar siquiera? ¿ O si a los invitados no les agrada y dicen que es muy básico?

Miles de preguntas sin respuestas se invadieron cada recoveco de mi mente dejando a mi pobre alma en un bosque lleno de neblina y fantasmas con preguntas que bajaron aún más mi autoestima y no me permitieron levantar mi trasero de la cama aunque sea.

La me te muchas veces te juega malas pasadas olvidando que son uno mismo y pertenecen a un mismo equipo.

Un montón de falshbacks de cuando me rechazaron el año pasado ocuparon mi mente por días así que la única solución cómoda que encontré fue dormir. Y así lo hice durante los últimos cinco días. Mañana es ña presentación y aún no he enviado nada ni siquiera se que ponerme, tampoco me he fijado la ubicación.

Estuve muy ocupada sintiendo lo miserable que es mi vida para hacer esas cosas.

Por la noche suena el timbre y no tengo intenciones de abrir pero son tan insistentes que el sonido está empezando a fastidiarme.

Abro la puerta con mala cara pero al segundo esta cambia.

Unos ojos grises y una cabellera rubia me esperan al otro lado.

-Hice la cena- señala el tapper que tiene en manos.

Y con esa dulce y encantadora voz que hipnotiza y a su vez me saca la primer sonrisa de la semana la hago pasar.

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Fue un capitulo corto pero necesario.

¿Qué opinan de Gianna hasta el momento?
¿Les agrada?

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