Capitulo VII

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Gianna

Saludo a Max desde fuera del auto y esa es la señal para que se dirija a la carretera.

La italiana baja de un aston martin blanco y a decir por su aspecto luce un poco cansada, quiero creer que es por la hora aunque eso me hace sentir un poco culpable la verdad.

-A estas horas creí que ya no aparecerías.

-Pues creíste mal.

No lo dice de tan mala manera pero se escucha grosera su respuesta y me intriga saber el porqué.

-¿Sucede algo?-pregunto sin rodeos.

-No.

-Si no quieres hablar esta bien pero callar no siempre es la solución.

-Lo dice la persona más reservada que he conocido.

-¿Crees que soy hipócrita?

-No, lo siento. Lamento haber contestado así, no es contigo la cuestión.

-¿Y con quien si se puede saber?- le pregunto pero ella solo niega con la cabeza.

-Así como puedo saltarme en los techos se hacer muchas cosas. Puedes decirme, enserio, se saltar, correr y golpear también por si acaso.

Ella solo ríe y niega con la cabeza antes de volver a hablar.

-No es algo importante.

Me acerco a ella y la tomo suavemente por las mejillas.

-Todo lo que tenga que ver contigo es importante. Nunca olvides eso.

Se me queda viendo con esos ojos grandes y los labios medio entreabiertos.

-¿En serio?

-Por supuesto. Te lo digo por ti ¿si? Como protagonista de tu vida eres lo más importante en ella y lo que no sirve que tampoco estorbe. Así que desecha todo lo que te haga mal.

Me encanta como das consejos de autoestima aun cuando si no estas acelerada y sin dormir sientes que no sirves para nada y te preguntas ¿Para que seguir en este mundo?

La tormenta que tiene en sus iris se clava en los mios y a pesar de que aún luce cansada ya no se nota triste.

-Vale- dice agradecida.

Ya que no puedo con mi autoestima intentare subir el suyo al menos.

-Ven.

Mi mano baja y toma la suya y la guio por el puerto. El capitán nos recibe en el pequeño yate y yo le muestro a ella todo el lugar.

-Es precioso ¿Cómo lo conseguiste a estas horas y tan pronto?

-Tengo contactos. Ellos hacen todo más fácil.

-No entiendo como puedes ser reservada y sociable a la vez, es increíble.

-Se trata de equilibrio, hablo pero también escucho. Luego les digo algo que ellos piensan sobre mi y creen que me conocen así que se ven obligados a hablar de ellos inconscientemente. Además no soy de llevarme mal con nadie.

-Interesante.

Nos recostamos en unas silletas que hay el la delantera del barco y pasamos ahí un buen rato .

El agua se ve tranquila y el cielo está aclarando poco a poco, las estrellas van desapareciendo con la llegada del sol y los colores que este trae son impresionantes.

El móvil de la italiana suena pero ella se ve muy cómoda como para atender la llamada. El móvil vuelve a sonar y me observa a lo que yo levanto las cejas en una pregunta silenciosa pero ella solo niega con la cabeza y deja que el sonido llene el ambiente. Cuando la música vuelve a interrumpir la paz en la que nos encontrábamos se ve obligada a contestar.

Cadenas De VeranoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora