Isabella

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Es la primera vez que dormiré fuera de mi casa

Sofía estaciona su auto en la entrada de la casa pensé que ella vivía en un departamento aunque al ver su casa me hace pensar que es alguien muy familiar o tal vez vivan más personas aquí

"Su esposo por ejemplo" no ella no lleva anillo

—Vamos— nos dice a Rosita y a mi, la seguimos en silencio sin demorarnos mucho. Se ve muy molesta y graciosa con ese enorme suéter cubriendo su cuerpo— Adelante— se hace a un lado para que podamos entrar antes que ella

El lugar se ve acogedor, con luces cálidas y con fotografías al rededor de la sala, es muy diferente a mi casa, aquí se siente el calor de una familia.

— Solo hay un cuarto libre— asentimos ante sus indicaciones— Así que Rosa dime donde llevarte

Eso no era parte del trato, no puede corréela

—Ella puede dormir conmigo— digo pero se pone aún más molesta ¿que le pasa?— No tengo ningún problema con eso

—Yo si— me asustan sus palabras

¿Tiene problema con dos mujeres compartiendo habitación? No puede ser no quiero quedarme aquí, quiero regresar a mi casa o peor a la celda

—Tengo problemas en dejar que compartas habitación con una mujer que no conoces— agrega— Piensa un momento Isabella hace unas horas estaban en la cárcel por agresión... una que ella inició

No tengo nada que pensar no puedo correr a la mujer que me salvo, no es correcto ni educado hacerlo, donde quedo la amabilidad dd esta mujer porque se está comportando como un ser muy cruel

—Sofía...

—No— camina hacia Rosita— ¿Y bien?

Rosita se ríe en su cara, ¿pero que hace?

—Escucha Sofi, ¿te puedo decir así?

—No

—Bien, Sofi— abro los ojos al ver como Sofía se acerca intentando asustarla, estas dos terminarán en una pelea— Justo ahora no puedo ir a ningún lado... se porque no me quieres cerca— Rosita me mira

—Te dije que no me llames así— su tono suena muy forzado— Así que no me provoques

—No lo estoy haciendo— claro que lo está haciendo— Solo dime donde puedo dormir y mañana me iré... no es que me muera por estar en una casa cómo está— señala el lugar de manera muy despectiva

—Ah, perdón majestad no sabía que mi casa le resultaba desagradable

"¿Sofía puede comportarse así?" Estoy sorprendida parece una adolescente soltando ese tipo de comentarios

—Son solo ciertos tonos hostiles los que me desagradan— Rosita continúa usando ese tono que Sofía le advirtió no usará— Pero mira... no seas insegura... ¡desconfiada!, quise decir desconfiada

—Sofía, mira si te molestamos podemos irnos— intervengo antes que se vayan a agarrar a golpes— Disculpas las molestias

Camino hacia Rosita y la invitó a que me siga fuera de aquella casa, me siento muy incómoda con la actitud de Sofía prefiero dejarla sola y que se calme antes de armar una escena

—Gracias, tendré listo el dinero cuanto antes

—Mala elección de palabras— me dice Rosita cruzándose de brazos

—¿Qué?— le pregunto sin comprender

Mira detrás de mi y comprendo todo

Sofía me toma de la mano y me jala de nuevo a mi posición inicial, me asusta su arrebato pero no tanto como su rostro lleno de furia

Amor DiferenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora