Marvel: Psiquiatra

Capítulo 78: Arroz frito con huevo y bistec

Capítulo 78: Arroz frito con huevo y bistec

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Wong abrió la puerta y Stephen entró.

"Entra; el Anciano te está esperando."

Stephen echó una última mirada a Wong y luego entró en el ático. Una vez dentro, una figura con una túnica amarilla estaba de pie dándole la espalda.

Cuando Stephen se acercó, el Anciano finalmente se dio la vuelta. Stephen miró al Anciano y luego a sus propias manos.

"¿Pueden aún sanar mis manos?"

La Anciana escuchó su pregunta y se detuvo un momento. Volvió a mirar a Stephen y preguntó: "Cuando Lorien te envió aquí, ¿no te dijo por qué viniste?"

¿Por qué vino? ¿Y todos conocen a Lorien?

Pero Stephen negó con la cabeza.

"Lorien me dijo que aquí es donde está mi futuro".

—Así es —asintió la Anciana, agitando la mano—. Wong te guiará y te ayudará a familiarizarte con este lugar. Síguelo. Después de que recibas lo que necesitas, podrás practicar aquí.

Ahora fue el turno de Stephen de quedarse atónito.

¿Vives aquí?

"Pero mis manos..."

Antes de que Esteban pudiera terminar, el Anciano lo interrumpió.

"Tu decides."

"Está bien."

Stephen cruzó las manos y aceptó la situación. No le sorprendió que no lo hubieran dejado fuera de combate; sabía de la existencia de los magos, especialmente de la Bruja Escarlata. Esta conciencia lo hizo menos impaciente y arrogante que antes. En cambio, se calmó, dispuesto a aprender.

La razón de su actual compostura era doble: la posición de Lorien y la sensación de seguridad que sentía gracias a él, y la comprensión de que la existencia de magos y superhéroes había cambiado su comprensión del mundo. Ahora sabía que el mundo no era tan simple como alguna vez pensó.

Stephen entró rápidamente y salió igual de rápido.

Wong, que estaba esperando, le hizo un gesto a Stephen para que lo siguiera.

"Vamos. Te llevaré a tu futura habitación y te traeré algo de ropa y otros artículos esenciales".

Stephen miró la ropa que llevaban los otros magos.