Capítulo 19: Entrega

184 32 8
                                    






¿Estas segura?

Si Amity, no me preguntes, por última vez, nos merecemos una última vez— Luz tomó el rostro de la alfa entre sus manos y volvió a besarla, Amity por su lado, tratando de no aplastar a Luz que se encontraba debajo de ella, se aferró fuertemente a las piernas de la omega separándolas y colocándose entre ellas.

—Du bist perfekt— le dijo y se hundió sentir del cuerpo de Luz, la calidez que le hacía sentir jamás la experimentara en ningún otro lado —Du warst sehr mutig.

Movió sus caderas despacio para aumentar el ritmo después de un rato, Luz nunca dejó la espalda de la alfa, aferrándose a ella con fuerza y hundiendo su rostro en el cuello de Amity besándola.

—Anudame Amity— rogó entre gemidos.

—No.

—Por favor, te lo suplico quiero sentirme llena de ti.

—Te arrepentirás despues m— advirtió Amity.

—No, no lo haré— Luz negó aferrándose a la alfa y aprisionándo su cuerpo con las piernas.

Sintió esa satisfacción del nido formandose en su interior y sonrió, Amity no había cambiado mucho, siempre terminaba cediendo a sus peticiones

Le gustaba sentirse llena de Amity, Amity tenia razón, una vez que un lobo escoge a su pareja destinada es difícil que sienta pleno con alguien más, aunque no haya marcas de por medio

La Bligth la cargo entre sus brazos aún sin poder salirse de ella por el nudo y camino hasta adentrarse a la playa

Se besaron de nuevo hasta perder la razón.

El arrepentimiento llegó al dia siguiente, pero ninguno fue capaz de admitirlo en voz baja

—¿Cuando te irás? — preguntó Luz.

—Supongo que, unos días, tendré que darme de baja en la escuela y haver otro pendientes.

—¿Entonces de verdad te irás?

—Si— asintió la menor —lo que menos quiero es estorbar engu vida, y si me quedó será lo único que haré, perdón por portarme como una idiota antes.

—No te preocupes, así te conocí después de todo y así te ame.

—Gracias por amarme Luz— le dijo la alfa con una expresión melancólica.

Ambas subieron al coche de la alfa con sus ropas sucias y sus cuerpos con rastros de arena

Finalmente, Amity le dio un beso en la mejilla a Luz y la dejo fuera de su departamento

—Adiós— se despidió con la voz temblando. Tratando de no llorar frente a la omega, aunque se sentía infeliz porque estaba dejando al amor de su vida para que fuera feliz con alguien mas que no era ella, alguien que la mereciera más.

—Adiós Amity.

Luz miró al coche retirarse hasta que este se perdió al doblar la esquina

Cubrió su rostro con las palmas de sus manos empapandolas con sua lagrimas que cain sin parar.













¿Listos?

No volveré a enamorarme de tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora