La última vez que te vi | Jinsu

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–Dejaremos el vehículo aquí– Seokjin hizo una señal como si se lo hubiera hecho a uno de sus hombres. Yoongi desea que Seokjin deje de cambiar tan abruptamente de soldado, al Seokjin que conoció en su ciudad natal –. Iremos a pie.

–¿No podemos al menos ir en el coche un ratito más?

La mamá de Yoongi se atrevió a preguntar, pero Seokjin negó con la cabeza.

–Parece que mi hijo está a punto de sacar a ese niño…

–Mamá…

–Yoongi, necesitas acostarte.

–No podemos– Seokjin lo volvió a reiterar, la madre de Yoongi calló –. Ese camión es una gran señal de dónde escapamos. No seremos bienvenidos en el próximo pueblo.

Entonces ella se resignó y ayudó a Yoongi a levantarse, mientras Jeongguk fue alzado en sus brazos para continuar caminando. Seokjin los miro todo el tiempo, realmente estaba examinando a Yoongi de arriba a abajo, y luego abandonó el plan.

–Tienes razón, no podemos seguir así.

–¿Jin?

Lo vieron subir sus cosas nuevamente al camión, hizo que Yoongi y su madre entraran, pero ahora Yoongi estará en el asiento del copiloto.

–Esta vez conduzco yo, y cuando lleguemos allí, quiero que hagas lo que yo diga, pase lo que pase.

Seokjin lo miró fijamente hasta que Yoongi asintió y encendió el motor.

Conducir con un solo brazo estaba bien, Seokjin iba un poco más rápido de lo que Yoongi había estado acelerando.

Estaba agradecido de que Seokjin tomara esta decisión, porque los pies de Yoongi se habían hinchado y estaba tan grande que ya no quería caminar. Se sentía sin aliento y lo único que quería era estar acostado en esa etapa del embarazo.

Cuando empezó a ver casas desde lejos, sintió sueño y durmió un poco.

Pero cuando finalmente se detuvieron, escuchó muchas voces y movimiento afuera, luego Seokjin salió del auto y Yoongi y su mamá lo vieron desde adentro.

Levantó la mano y unos hombres se le acercaron. Yoongi vio que lo amenazaban con armas y se bajó del vehículo a pesar de las advertencias de su madre.

Él sabe cómo debe verse por los lugareños. Seokjin era el único que tenía uniforme militar y este camión era uno de los utilizados en el norte. Se dio cuenta de que por eso había planeado que caminaran hasta aquí.

–¿Qué haces aquí, basura?

–Soy Kim Seokjin, un soldado desertor buscando asilo…

–No hay ayuda para ti ni para los de tu patria.

–Por favor, mi compañero está encinta, es del sur– Intentó hacer saber que estaba herido, levantando también en el aire su brazo amputado –. El y su madre necesitan un lugar donde quedarse, tenemos un hijo.

En ese momento Yoongi llegó a su lado, Seokjin dejó de hablar al sentir que se acercaba, y vio a los habitantes del pueblo bajar sus armas.

–¿De dónde eres originalmente?

Ahora le preguntaron a Yoongi, y él dejó de ver a Seokjin cuando levantó la cabeza.

–Isla de Jeju, o lo que queda de ella.

Estaban en silencio, evaluando si dejarlos entrar o no. Yoongi vio a Seokjin ponerse de rodillas y rogarles que los dejaran encontrar refugio en su pueblo.

Seokjin, el soldado de mayor rango y el más temido. De rodillas, rogando por un techo para su familia y la que quedaba de Yoongi.

–Por favor, en unos meses dará a luz y hemos estado haciendo este viaje incansablemente para escapar.