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Jake, aún aferrando la chaqueta de Sunghoon, se encuentra más tranquilo. Después de la reunión, decide hablar con su mejor amiga, Yunjin, la Bruja miembro del Aquelarre de la ciudad. Sabe que ella lo escuchará sin juzgarlo y le ayudará a procesar todo lo que está ocurriendo.
Caminando hacia el lugar donde suele encontrarse con Yunjin, un claro en el bosque al borde de la ciudad, su mente sigue dando vueltas a todo lo que ha sucedido. ¿Cómo había pasado de sentir desconfianza por la llegada del Clan Silver Moon a estar completamente conectado con su líder, Sunghoon?
Cuando llega, Yunjin ya lo espera, sentada sobre una roca rodeada de flores que se mueven ligeramente con la brisa. Su larga cabellera oscura brilla bajo la luz de la luna, y un aire de misterio siempre la envuelve.
—Ah, ahí estás, omega enamorado —Dice Yunjin en tono burlón sin siquiera darle tiempo a hablar—. Sabía que vendrías a contarme todo.
Jake suspira y se sienta a su lado, sintiéndose seguro en su compañía.
—Es que... todo ha sido tan rápido —Comienza, mirando las estrellas—. Sunghoon es... es diferente. No puedo explicarlo, pero cuando estoy cerca de él, es como si todo cobrara sentido.
Yunjin se ríe con suavidad, observándolo con una ceja levantada.
—¿Sunghoon, el Vampiro? —pregunta, fingiendo incredulidad—. ¿El mismo al que no querías ni cerca de nuestra ciudad, y mucho menos de tu Pack? Porque recuerdo muy bien lo molesto que estabas cuando escuchaste que su Clan venía.
Jake baja la cabeza, recordando cómo se había sentido al principio.
—Sí, lo sé. Lo odiaba... o al menos, eso creía. Desconfiaba de ellos. Pensaba que solo causarían problemas, que eran peligrosos. Y Sunghoon... parecía frío, inalcanzable. Pero todo cambió cuando lo vi. Cuando me vio.
Yunjin lo observa con una sonrisa divertida, apoyando su barbilla en una mano.
—Oh, Jake, suenas como un bobo enamorado —Se burla suavemente, pero sus ojos muestran un cariño genuino—. Si alguien me hubiera dicho que terminarías cayendo por un Vampiro, no lo habría creído. ¿Qué fue lo que te hizo cambiar tanto de opinión?
Jake se sonroja ligeramente, pero no puede evitar sonreír mientras recuerda el encuentro.
—Es que... lo siento. Lo siento en lo profundo de mí. No puedo describirlo. Cuando estamos cerca, es como si el mundo se detuviera. Sé que es peligroso, sé que todavía hay muchos problemas, pero no puedo ignorar lo que siento.
Yunjin suspira y sacude la cabeza.
—Ay, Jake. El destino es una cosa complicada, especialmente cuando se trata de Vampiros y Hombres Lobo. Pero entiendo lo que dices. El vínculo entre mates es poderoso, incluso si no siempre tiene sentido al principio. Solo... ten cuidado, ¿sí? No dejes que este amor te haga olvidar quién eres.
