Capitulo nueve

473 59 15
                                    

Seungmin lo tomó de la cintura jalándolo hacia él. Jeongin colocó sus manos en su pecho y lo miró sorprendido ante el repentino arrebato. Sus rostros quedando muy cerca el uno del otro.

—¿Entonces me dirás que fue eso que tú y Hyunjin estuvieron haciendo mientras yo no estaba? —indagó en un tono de voz que le provocó un escalofríos por todo el cuerpo.

Jeongin apenas pudo captar la pregunta hecha, distrayéndose fácilmente con la cercanía y la emoción indescriptible que le recorrió al ver la expresión del hombre que lo miraba con un profundo cariño que no entendía aún como podía estar dirigido a él. Llevó una de sus manos a su mejilla y la recorrió hasta su mandíbula trazando líneas con la punta de su dedo. Seungmin permitió todo en absoluto silencio. Mirándolo con atención y sin soltar su agarre sobre él manteniéndolo tan cerca como siempre hacia hasta que Jeongin lo besó. Siendo dulce y suave como cada pequeña parte de él.

Seungmin continuó el beso siguiendo al más joven en aquel vaivén de sus bocas pero sin profundizar permitiendo que el rubiecito mantuviera su ritmo y tomara confianza en este. Su boca era dulce al igual que todo él y su tacto tan suave que le hacía sonreír. Era como el algodón de azúcar derritiéndose en sus labios.

Al separarse, Jeongin había pasado de su usual tono de piel a un rosado que se extendía en sus mejillas como un bebé. Seungmin dejó un beso mas corto en estos.

—¿Así que fue algo como esto? —provocó disfrutando demasiado de la imagen sonrojada del bonito chico. Se sentía tan afortunado.

Jeongin bajó su mirada a sus manos jugando con sus dedos en un gesto nervioso antes de volver a mirarle con la decisión brillando en sus ojos.

—No. —negó tímido pero con el interés y la disposición en su cara.

Seungmin estaba amando conocer cada una de las facetas de Jeongin. Era más que afortunado.

—Entonces... —lo tomó de la nuca y lo atrajo a otro beso esta vez sus bocas chocando bruscamente provocando que sus dientes chasquearan y que Jeongin gimiera abrumado ante la intensidad de este apenas siguiendo su ritmo. —¿Era más como esto?

Suspiró. —Si así. —asintió buscando más de su boca.

Seungmin lo levantó del suelo con una mano haciéndolo gritar sobresaltando ante el rápido movimiento y pronto lo tuvo en su regazo sin darle tiempo de pensar ni de notar que Hyunjin volvía de contestar su teléfono y se acercaba a ellos. Seungmin lo besó con un tipo de ansiedad y agresividad muy diferente a la que el mayor manejaba. Ambos eran diferentes pero le hacían sentir lo mismo de formas muy distintas.

—Min... —gimió contra su boca aferrándose a sus hombros y removiéndose sobre su regazo abrumado.

El deseo regurgitante que había sentido desde que Hyunjin lo había tocado ese día más temprano renació nuevamente. Y Seungmin pareció consciente de ello dándole una mirada diferente al resto y mirando a sus espaldas recalcando la presencia de Hyunjin.

Se giró a mirarlo pero Seungmin lo impidió tomando nuevamente su mejillón y volviendo a besarlo una y otra vez hasta que fue mancilla en sus manos gimiendo y retorciéndose como si no pudiera controlar el deseo que sentía. Las manos del mayor subieron por su espalda y acariciaron su cuello y clavículas recorriendo la zona del pulso con sus nudillos fríos. Reaccionó a esa sensación acercándose más a ella y buscando contacto más directo a su vez que el pelinegro llevaba sus manos bajo su suéter de algodón y apretaba la piel de su cintura entre sus puños.

Jadeo agobiado por la sensación que le recorrió.

Se separó rompiendo el beso con su respiración agitada en contraste a Seungmin quien parecía tan controlado y en calma que el único cambio que había tenido había sido su cabello ligeramente desordenado hecho por sus propias manos y aún así, se veía tan perfecto e impecable como siempre.

La pareja de al lado || Hyunminin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora