Camila, una estudiante de preparatoria, tenía un negocio de tareas ilegales junto a sus amigos. Nunca imaginó que la llegada de un chico transformaría su vida por completo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
☆ ☆ ☆ ☆ ☆ ☆ ☆ ☆ ☆ ☆ ☆ ☆ ☆ ☆ ☆ ☆ ☆ ☆
Entré a casa y vi a mi hermano Rafa en la sala, viendo televisión. Me acerqué a él, sonriendo.
—¿Qué tal te fue hoy? —me preguntó, sin dejar de mirar la pantalla.
—Muy bien —respondí, quitándome las zapatillas—. Fui al parque con Memo, un chico nuevo en la escuela.
Rafa levantó la mirada, curioso.
—¿Memo? ¿Es simpático?
—Sí, es divertido y buena onda —aseguré, recordando lo bien que la pasamos juntos.
Rafa me miró con una expresión burlona.
—¿Y te gusta, o solo son amigos?
Me sorprendí un poco, pero traté de mantener la calma.
—¡No! Solo somos amigos.
Rafa sonrió de nuevo.
—¿Segura? Sonreíste mucho al mencionarlo.
Intenté cambiar de tema.
—¿Y a ti, cómo te fue en la entrevista de trabajo?
Rafa sonrió satisfecho.
—Muy bien, y además conocí a un chico —dijo, con un tono picarón.
—¿Cuál es su nombre? —pregunté, intrigada.
—Se llama Alex —respondió, con una sonrisa que lo decía todo.
Me quedé helada por un momento.
—¿Hablas en serio? ¡Alex es mi amigo! —exclamé, sorprendida.
Rafa levantó las cejas.
—No sabía que era tu amigo, pero sí, él me interesa —dijo, observando mi reacción con cautela. —Espero que no te moleste.
No era la primera vez que mi hermano se interesaba por un chico, y aunque la sociedad no lo viera bien, a mí solo me importaba que él fuera feliz.
—Para nada, solo no quiero que salgas lastimado —le respondí, sonriendo para tranquilizarlo.
Después de nuestra conversación, subí a mi habitación, pero mi mente no podía dejar de pensar en Memo y en lo que Rafa había dicho. ¿Será que en verdad me gustaba?
*ੈ✩‧₊˚༺☆༻*ੈ✩‧₊˚
Al día siguiente, todo transcurrió con normalidad. Por la mañana, hablé con Memo sobre lo bien que la pasamos en el parque.
Durante el receso, estaba con Tenoch y los demás debajo del árbol, pero me aparté para ir al baño. Cuando regresé, no los encontré.
Miré a mi alrededor y vi a Memo cerca de Daniela, quien lo consolaba. Me acerqué, confundida.
