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Izuku suspiro por tercera vez antes de entrar a su oficina. Realmente no le atraía ese Omega en ningún sentido, pero debía fingir lo contrario para lograr que la empresa que su padre le heredo crezca y sea reconocida por todos.

Tenía que conseguir la firma de esa empresa para estar a nada de su objetivo.

--Hola amor~♡ -saludo con tono pícaro al entrar- ¿A qué debo el honor de tener tu hermosa figura en mi empresa? -beso la mano del pelinegro, quien lo miraba con un ligero sonrojo.

--Nada realmente, solo quería ver a mi prometido -dijo tomando el rostro pecoso para dejar un casto beso en sus labios mientras sentía como el otro abrazaba su cintura- También te quería decir que hoy habrá una reunión en la mansión de mis padres, y como mi pareja tendrás que estar presente.

--Claro, yo encantado, ¿A qué hora paso por ti?

--A las seis estaría bien, además... -sus palabras se detuvieron, pues al acercar su rostro al cuello del pecoso pudo notar una herida recién echa y un leve aroma que le causaba incomodidad, pues sabía bien que esa era una marca de pertenencia. Sabía que debería de soportar este tipo de situaciones, pero no pensó que desde ahora su prometido lo esté engañando con alguien más... Aunque ni crea que les dejara el camino fácil, ese Alfa era suyo.

--¿Además? -preguntó Izuku con un tono coqueto.

--Además... Quiero tenerte un rato, solo para mí, en mi cama -dijo mientras lo abrazaba y evitaba gruñir al tener el olor de su Alfa combinado con el de otro Omega, así que libero sus feromonas para volver a marcarlo sin imaginar que esa acción le provocaría un gran dolor al pecoso.

El rubio se lo advirtió y ahora estaba evitando gritar, pues la herida que los colmillos le habían dejado ardían como el mismo infierno.

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Katsuki tenía que ser cuidadoso mientras obtenía información y reunía los contactos adecuados para hacer caer la empresa de ese maldito Omega.

--¿Es en serio? -dijo con gracia y burla mientras miraba el resultado que su búsqueda en Internet le arrojaba- ¿Con esta basura te comprometiste, Alfa? -abrió una foto para poder imprimirla más tarde- Yosetsu Awase, ¿Eh? Bueno, admito que no estás tan mal, pero quien se quedará con Deku seré yo. Yo seré quien forme una familia con él. Si te amará, no estaría pensando en divorciarse, y sé que lo está haciendo por mí, porque Alfa me ama.

Acarició su vientre luego de apagar su celular e ir a la cocina donde encontró a su hermano mayor haciendo la cena.

--Nii-chan -llamo de forma tierna al otro rubio, quien lo miró extrañado antes de apagar la estufa- Gracias por venir, bastado.

Gogo Bakugo era un Alfa de temer y un exitoso investigador privado, pero si de su pequeño hermanito se trataba lo daría todo con tal de verlo feliz.

--¿Trajiste lo que te pedí?

--Claro que sí, el folder está en la mesa. Hasta puse algunos datos adicionales, pero dime, ¿Qué te ha hecho esa familia? -preguntó con semblante serio.

--Nada. Solo es el hijo al que tengo en la mira -dijo sin despegar la mirada de las fotos que había ahí dentro- Aún no te puedo decir que es, pero ese idiota me quiere quitar algo muy valioso.

--Uuuuu Venganza. Me gusta que te defiendas, hermanito -hablo con una gran sonrisa- Pero si la cosa se te sale de las manos solo debes de llamarme y pondré las cosas a tu favor.

Lo sabía, desde que estaba pequeño sabía lo sobre protector que era Gogo. Sabía bien las cosas atroces que puede llegar a hacer con tal de no verlo llorar.

Gogo será su "Carta bajo la manga"

De todas formas ya tenía todo ganado. Ese omega no debió meterse en su camino.

Ese alfa es MÍO (DkBk)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora