¿Estás consciente de tu cuerpo?
De lo maravilloso que es.
De lo poderoso y grande que puede llegar a ser.
Si lo sabes entonces expulsa el negro que te margina.
No cambies tus piezas reales por unas inservibles.
Vive... VIVE PARA CONTARLO.
Deja ese maldito veneno que quema tus venas.
Ya estoy cansada de verte sufrir.
Y de verte morir.
No seas como la copia no quiero tu partida
Mereces todo el mérito posible por ser quien eres...
¿No ves que siempre me ahogo entre mi grito silencioso por verte creer que estás sola?
No. Si yo no estoy sola tú tampoco lo estás.
Nunca jamás vuelvas a negar tu sexo.
Eres un ente
Un ser
Una mujercita
Con la capacidad de besar un sueño con gracia divina.
Tienes que entenderme Virgen carmesí. No puedo simplemente verte vivir y morir.
El tiempo espera... Y se desespera...
VIVE PARA CONTARLO
Cada uno de esos momentos son un tesoro.
No te pierdas entre los abismos y sigue a la melodía de tu alma
Como quisiera... que entre las memorias de un muerto de hambre entiendas que esta no es la mejor opción.
TIENES QUE SEGUIR VIVIENDO.
Olvida lo que la sociedad dice. Lo que esa sociedad podrida te ordena... Y te susurra...
Te prometo que en un dibujo gris verás a un ángel y demonio y podrás reconocer que hasta aquello es bello.
Cecile... ya no tengo elección.
Cuando lágrimas caen me ahogo en ellas.
Te veo partir y te veo sufrir...
TIENES QUE VIVIR.
No puedes irte como ella, mi sol.
Pero no me escuches. No creas en mis palabras. Ya no soy carne ni sangre. Ni espíritu del cual pueda apoyar mi conciencia.
Después de todo... Yo no lo hice. No creí en mí.
Por ello... la muerte se olvidó de mí.
Tienes que vivir...
Tiene que morir...
Olvida mis palabras.
Te amo.
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La muerte se olvidó de mí
PoesieVarios escritos, pensamientos, poemas, de la vida, la espera, el encantamiento.
