Que honrado estoy, soy el mejor del mundo, puedo tener lo que todos no pueden tener.
Al pasar los años he gozado placeres más allá de lo mundano y he vivido reflexiones personales grandiosas. Tengo dinero. Tiempo. Y a todas las personas que deseo, pero sólo eso.
A cambio de tanta idolatría, no puedo hablar, ni decir nada. El mundo se cae a pedazos y nadie se detiene a verlo.
Siento como los árboles me gritan por piedad mientras los cortan. Pero las empresas no me escuchan.
Veo como los animales desahogan sus penas, con cada cuchillada. Me aturde ver que lo hacen para colgarlos en salones, usarlos de ropa y explotarlos para una alimentación humana de tan solo un treinta porciento. El otro, son los que viven en el lodo y claman por educación, por sabiduría.
La inteligencia nos hace fuertes.
Pero no nos da la influencia necesaria.Mirame a mi, encerrado en un cuerpo que lo puede liberar todo, y sin embargo el resto no puede oír, entender. Porque no entienden mi lenguaje. Y aunque les hable en un idioma simple no escuchan, porque el gobierno les ha tapado los oídos.
Sufro al ver como nos autodestruimos. Me consumo como vela y sólo me queda escribir. Porque si no me escuchan vivo, al menos escucharán mis pensamientos muertos.
Tengo fe de que aquellos que sepan leer, cambien el mundo.
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La muerte se olvidó de mí
PuisiVarios escritos, pensamientos, poemas, de la vida, la espera, el encantamiento.