Nubes de Algodón | Robert Floyd | Jake Seresin [BL]

"Hard Deck"

Bob llega primero a Hard Deck, saluda a Penny con emoción y le agradece cuando aún se acuerda de lo que siempre pedía cuando iba allí. Luego, se sienta cerca de la mesa de billar, le gusta así, sin tener que hablar más de lo necesario, analizando a sus nuevos compañeros. Sigiloso y sin llamar la atención, aunque, de igual forma lo hace. Esta bebiendo su soda saborizada favorita con la variedad de frutos secos que Penny escogió especialmente para él, cuando alguien está preguntando quién es él. Y por un segundo se sorprende, un poco nervioso por una presentación que no había pensando, pero termina por simplemente decir: -Me llamó Bob. -es un poco soso, pero no puedo arreglarlo ahora que lo ha dicho.

Los pilotos comparten una mirada, con uno de ellos preguntándole su apodo, a lo que él responde: -Es Bob. -sabe que no es diminutivo más asombroso en comparación a otros aviadores, pero nunca lo pensó demasiado, le gusta así. Aunque a sido sinónimo de bromas por parte de sus compañeros desde que inició.

-¿Bob Floyd? -la única chica del grupo se acerca con una expresión de sorpresa. -¿Mi WSO?

Phoenix es amable, le integra al grupo rápidamente mientras se presenta y a sus compañeros. Fanboy es tan nuevo como él, mientras que los demás estudiaron juntos en su tiempo en Top Gun. Es un grupo agradable, así que a Bob se le hace fácil ser menos tímido. Incluso aunque Payback y Rooster sigan burlándose de su apodo tan "desabrido", pensando en darle uno nuevo. Algunos son un poco burlescos, pero no le afecta en absoluto, está acostumbrado a esa reacción.

Phoenix le dice que no les presté atención, que los ignore mientras siguen con sus payasadas, invitándole a jugar billar con ella. Y Bob acepta de inmediato, aliviado de estarse llevando bien con su piloto. No le hubiera gustado que las cosas fueran incómodas entre ellos, era importante tener una buena relación entre ellos. Después de todos, sus vidas dependian de la comunicación y la acertividad en el aire.

Colocándose en posición al otro lado de la mesa, Bob se siente confiado. Hace algunos años, tuvo un buen maestro.

-¡Hangman! -entonces, alguien grita antes de que golpee la bola, haciendo que se tense un poco. ¿Jake había llegado? No le sorprendía que todos allí le conocieran, viendo como se acercaba para recibir varios saludos. -¿Conoces al chico nuevo? Se llama Bob. ¿No es gracioso? -Payback menciona, sabiendo que Hangman disfrutaría meterse un poco con el chico, lo que generaría más diversión.

Sin embargo, no es lo que ocurre. -Si, supongo que lo es. -una sonrisa de labios finos se extiende en el rostro del hombre, acercándose a Bob, quien no había cambiado su posición, distraído con la presencia de Hangman y con la idea de que debía golpear la bola.

Entonces, el WSO se sobresalta cuando el piloto se detiene a su lado, inclinándose también sobre la mesa. Aunque eso no es exactamente lo que le sorprende, sino que la mano de Hangman se engancha en su cadera, tirando de él más cerca. Con una mirada traviesa, la sonrisa en su rostro se abre para ser más grande, mostrando sus perfectos dientes blancos.

Bob tiembla cuando la mano que conoce tan bien, se desliza de su cadera a su espalda, subiendo por ella hasta que se engancha en su hombro para tirar de él, haciendo que se incline en su dirección. Los labios de Jake dejan un ligero beso en su mejilla. Es pequeño y dulce, es todo lo que creerías que no podría ser Hangman, pero con la persona que ama es natural actuar así.

-¡Pero que... ! -entonces, luego del ligero aturdimiento que siempre le provocan los toques suaves de Jake, Bob recuerda que no están solos. En absoluto. Estan en un bar, rodeado de otros pilotos que les miran con una expresión diferente en cada rostro. Lucen como si estuvieran viendo algo imposible. Y es que, bueno, los que conocían a Hangman desde hace unos años, no creían posible lo que acababan de presenciar.