Satang, un extrovertido estudiante de segundo año, decide arriesgarse y conquistar a Winny, el apuesto y enigmático capitán del equipo de rugby de tercer año. Aunque Winny parece tener una vida perfecta, esconde serias dudas sobre su sexualidad.
Win...
Mientras la atmósfera se volvió más intensa, Satang se acercó un poco más, su mirada fija en los labios de Winny. Ambos sabían que ese momento era crucial, ese salto hacia lo desconocido. Winny se inclinó hacia adelante, sintiendo el calor del cuerpo de Satang y la electricidad que lo rodeaba. Justo cuando sus labios estaban a punto de tocarse, el timbre de la puerta sonó, interrumpiendo el momento mágico.
Winny se detuvo, su rostro mostrando una mezcla de frustración y resignación. Se alejó de Satang, sintiendo cómo la magia del momento se desvanecía. -¿Quién será a esta hora? -murmuró, pues no esperaba a nadie.
Con un suspiro de decepción, se levantó y se dirigió hacia la puerta, mientras Satang se quedaba en el sofá, una mezcla de nerviosismo y anticipación aún presente en su pecho.
Al abrir la puerta, se encontró con Neo, que parecía completamente despreocupado, con una gran sonrisa en su rostro y un aire de imposición. -¡Hey, capitán! -exclamó Neo, entrando sin ser invitado, con la misma energía estridente de siempre. -he venido a invitarte a mi casa en una hora ¡invitaré a algunas chicas que te van a encantar!
Winny intentó mantener la calma, sintiendo cómo su entusiasmo se desvanecía con cada palabra de Neo. -No estoy de humor para eso, Neo.
Pero Neo no fue disuadido. -Vamos, te conseguiré una virgen, ¿No quieres dejar de ser el único del equipo que no ha salido con una chica? -dijo con una risa burlona, lanzando un guiño que hizo que Satang se sintiera incómodo.
Satang observó desde el sofá, sintiendo cómo el ambiente se tornaba tenso. La actitud burlona de Neo le hizo sentir como si estuviera en una jaula.
-Mira, Neo, no hablemos de eso. Ya tengo planes -dijo Winny, tratando de perderse en la conversación.
Satang sintió una punzada de incomodidad. Neo no solo jugaba con los prejuicios, sino que también lo estaba convirtiendo en el blanco de sus chistes en un momento donde todo lo que había intentado construir con Winny ahora se desmoronaba.
-hoy será una noche de excesos y mucho sexo. -insistió Neo. - ¿Eh, capitán? -dijo, sin poder resistirse a reír.
Winny sintió cómo la frustración aumentaba en su pecho. No quería estar en esa conversación, especialmente justo después de haber compartido un momento tan cercano y significativo con Satang.
-Ya te he dicho que no estoy interesado -respondió Winny, tratando de sonar firme, pero su voz se vio empañada por la incomodidad que le provocaban los constantes comentarios de Neo.
Neo observó con una sonrisa burlona mientras Winny intentaba mantener la calma. - Parece que para ti no hay nada emocionante en estos días. Pero, claro, si estuviera en una habitación con un chico como Satang, no dudaría en bajarme los pantalones.
Satang sintió un escalofrío recorrer su espalda, y la incomodidad se apoderó de él en un instante. Winny, por su parte, frunció el ceño, cada palabra de Neo lo picaba un poco más.
-Por favor, Neo, eso no es necesario. -dijo Winny, tratando de mantener su voz serena, pero ya sentía cómo la frustración se acumulaba en su pecho.
Neo se acerca lentamente a Satang mientas sus dedos se deslizaron por la espalda del más bajo, una caricia que, aunque casual, cargaba con un peso que hizo que Winny apretara los puños, sintiendo cómo la incomodidad de la situación alcanzaba un nuevo nivel.
Satang sintió el calor de la mano de Neo, y a pesar de la situación incómoda, no podía quitarse la sensación de que estaban cruzando una línea. Se movió ligeramente, alejándose del contacto, su mirada fija en Winny, buscando su apoyo.
En ese momento, algo se rompió en Winny. -¡Basta! -gritó, su voz resonando en el espacio. - lo que estas haciendo es acoso, y no voy a permitir que hagas eso conmigo y mucho menos con Satang. No quiero que nos hables como si fuéramos un objeto para tus bromas. Así que ¡largo de mi casa!
Finalmente, Neo lanzó una última mirada despectiva hacia ambos antes de darse la vuelta y salir por la puerta, murmurando algo incomprensible mientras la cerraba de golpe bien fuerte tras de sí.
El silencio que siguió fue palpable, sus corazones aún latiendo con la adrenalina de la confrontación. Winny se giró hacia Satang, que lo observaba con una mezcla de sorpresa y calma.
-¿Estás bien? -preguntó Satang, acercándose un poco más, su preocupación reflejada en sus ojos.
Winny se dejó caer en el sofá, respirando profundamente, sintiendo que la tensión en su cuerpo comenzaba a desvanecerse. -No sabía que iba a perder el control así. No quería que llegara a ese punto, pero tenía que decir algo.
Satang se sentó a su lado, su presencia ofreciendo un refugio que hacía que Winny se sintiera más ligero. -Hiciste lo correcto. -dijo Satang con sinceridad. -Tienes derecho a defenderte.
Una pequeña sonrisa se dibujó en el rostro de Winny. -Gracias. Suena tan simple, pero a veces es difícil encontrar las palabras.
Ambos compartieron un momento de silencio, permitiendo que la incomodidad se disipara. Winny luego miró a Satang con la seriedad que había aparecido momentos antes.
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Winny, respirando profundamente, comenzó a hablar en voz baja, su voz casi un susurro. -Sabes, Satang, creo que ese momento... ese momento en el que casi nos besamos...
Satang lo miró con ojos llenos de curiosidad y preocupación, pero también de esperanza.
Winny continuó, sintiendo que las palabras fluían con más facilidad. - Creo que estas haciendo un gran trabajo, con tu rol de conquistarme.
Satang se inclinó un poco más hacia adelante, su interés evidente en cada palabra que pronunciaba Winny. La atmósfera entre ellos había cambiado, convirtiéndose en algo más íntimo, más profundo.
-¿puedo besarte? -preguntó Satang, intentando captar la esencia de lo que Winny intentaba expresar.
Winny sintió cómo su corazón se aceleraba ante la pregunta de Satang. La sinceridad en su voz y el brillo sincero en sus ojos lo hicieron sentir vulnerable, pero también emocionado. Era como si el momento que habían perdido anteriormente ahora resurgiera con una fuerza renovada.
Con una suave inclinación de cabeza, Winny dio su aprobación. -Sí... sí, me gustaría eso.
Satang, aliviado y emocionado, se acercó un poco más, su mirada enfocada en los labios de Winny. El mundo exterior se desvanecía, y todo lo que importaba era ese instante y la conexión que estaban construyendo.
Winny cerró los ojos, sintiendo cómo el calor del cuerpo de Satang se acercaba más.
Justo cuando los labios de Satang rozaron los de Winny, una corriente electrizante recorrió sus cuerpos, llenando el aire con una energía nueva.
El beso fue suave al principio, casi como una exploración. Ambos estaban cautelosos, dejando que la delicadeza del momento marcara el ritmo. Pero pronto la suavidad se transformó en algo más profundo, más urgente, mientras se dejaban llevar por la intensidad de sus emociones.
🦥💰
Se vienen cositasss, Jajaj holaa, aquí el capítulo correspondiente de hoy, espero les guste, los leo el miércoles, bye!
