8. Compras domesticas

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"Hacen falta cerezas, de esas dulces, confitadas." Will le recordó a Max, su voz ahogada detrás de su cubrebocas mientras se estiraba el cuello de la sudadera un poco, acalorado. Max le miró con una ceja alzada "¿Cerezas confitadas?...creí que las odiabas." respondió Max confundido, dejando las latas de conservas que estaba cargando en el carrito de compras, caminando junto a Will mientras este empujaba el carro.

"Si. Pero a ti te gustan." le dijo Will, parándose al lado del estante lleno de tarros de cerezas, tanto confitadas como al marrasquino "Anda, ponlo en el carro, así yo aprovecho y me llevo un pastel Battenberg." dijo Will, ganándose una palmada en el brazo por parte de Max mientras este reía por lo bajo y ponía la lata de cerezas en el carrito casi lleno "Tramposo, solo no me quieres dar de tu pastel." le reprochó Max con una sonrisa "Para que se te quite yo voy a llevarme uno de esos pasteles de zanahoria chiquitos, y no te voy a dar nada."

Will le sonrió, con la única evidencia de esto siendo el arrugar de sus ojos, y se agacho un poco para acercar su rostro al de Max, su capucha oscureciendo el rostro de Max mientras el otro se le acercaba "¿Mm? ¿Ni la hora me vas a dar?..." le preguntó Will en un tono coqueto, haciendo a Max ruborizarse y empujarlo ligeramente "¡Ay, no seas así! ¡Hijo de la chingada!" se quejó Max, caminando lejos de el y empezando a revisar los panes de caja con vergüenza, sintiendo los ojos de los demás clientes del supermercado sobre él y Will, sintiéndose expuesto y con la cara roja aun con su gorrito de gato negro y su ropa oscura mientras Will se carcajeaba, ajeno a las risitas enternecidas de los otros clientes.

Will se le acercó, poniendo su mano en la parte baja de su espalda y acariciando la curva suavemente, como si se estuviera disculpando. Max le miró de reojo, aun avergonzado, e hizo un puchero al pasarle el pan embolsado, pero no se movió para quitar la mano de Will, dejándolo sostenerlo mientras conducía el carrito de compras y daban vuelta al siguiente pasillo.

"...Eres un tarado." finalmente refunfuñó Max, poniendo manzanas en una bolsa mientras Will le acariciaba la nuca gentilmente, jugando con los cabellos sueltos y ondeados que tenía ahí. "Mm-hmm..." le respondió Will, descansando el rostro en el gorro de Max mientras lo tocaba "...Hay azúcar en casa, ¿quieres que hagamos un pay de manzana?" le dijo, sin siquiera molestarse en responder su insulto.

Max ignoró el zumbido en su pecho cuando Will habló tan naturalmente. Casa. Su casa. De ellos y para ellos, nadie más. Suspiró pesadamente, rodando los ojos con falsa molestia, y aunque seguía sonrojado y con un puchero, no pudo evitar sentirse un poquito feliz. "Si, como sea. Tu corta las manzanas y yo hago la masa." le respondió. Tal vez esta domesticidad era algo a lo que podría acostumbrarse.

🐇🔪Tonotos🗡️🐈⬛ | DollBunny | Flufftober 2024Donde viven las historias. Descúbrelo ahora