Red & Red (Freezer y Tu)

(14)

|WHAT IS IT ABOUT MAN|

Y me pregunto a mí misma de nuevo.

¿Qué pasa con los hombre?

-Amy Winehouse

.

.

.

Narrador Omnipresente

-Entonces... Tengo que interrumpir la coronación y cnd empiece a llover lanzo un rayo de ki y el cielo se abrirá ¿no?- La peliblanca se aseguraba del plan.

-Si, así la plebe podrá verte como su legítima princesa y no a ella.- Afirmó con una sonrisa.

Sin saber que eran escuchadas por un temeroso Rey Rothbatt que corrió hasta donde estaba su hija para planear la desaparición de Cygnus... bueno, de Odette de Ambrisse.

Narra Freezer

Últimamente había estado muy molesto con todo en general, pues no había tenido a Cygnus cerca de mí y eso me indiponía cada día más y era peor cuando tenía que soportar a esa "princesa"

-Oh, que bueno que lo veo.- Se me acercó el Rey Rothbatt.- Necesito pedirle un favor.- Se veía pálido y preocupado.

-Claro, dígame.- Mantenía mi postura seria.

-Necesito que envíe a su mejor guerrero a una misión, es de vida o muerte y necesaria para la coronación.- Jugaba nerviosamente con sus manos lo que se me hizo extraño, por lo general era alguien muy desperocupado.

-Claro, llamaré a mi nave.

-Oh, no,no ¿No tiene alguien cerca de aquí? Ese planeta queda muy lejos y es urgente que busque la gema faltante para la corona, quizás pueda enviar a su Mano Decha: Lady Cygnus.- Fruncí el ceño, por lo que me decia era urgente así que ignoré el mal presentimiento y asentí.

-Esta bien, yo hablaré con ella. Mañana en la mañana ella estará rumbo a el planeta...

- Número 869%0

-Allá la enviare.

-Se lo agradezco.- Allí él se fue por su lado y yo entré a mi habitación, tomé el rastreador con el que me comunicaba con ella y la llamé, a los segundos una esfera tan roja como al sangre apareció,  allí se materializó Cygnus, cosa que me dejó sorprendido.

-¿Desde cuándo puedes hacer eso?- Pregunté anonadado.

-Desde siempre... creo, solo que nunca lo había hecho.- Rascó su brazo tímidamente pero recobró la compostura.- ¿Qué necesita?

-Te tengo una misión, que tienes que cumplir antes de la coronación. Tienes que ir a el planeta con estas coordenadas y buscar esto.- Le pasé el dispositivo holográgico con la descripción del lugar y dónde y cómo encontrar la piedra.

-Esta bien, volveré mañana en la tarde.- Se dio la vuelta para irse, pero quería que se quedara.

-Espera.- Ella tomó el pomo de la puerta pero se detuvo a escucharme, yo me levanté para tomarla de la cadera.

-Freezer...no.- Ella pidió.

-¿Segura?- Su respuesta fue el silencio y un suspiro.- Quiero tenerte por lo menos una última vez antes de perderte.- Rescosté mi cabeza en su espalda y ella decidió girarse para tirarse hacia mí y ambos terminamos en la cama.

...

Ella estaba recostada en mi pecho y en medio del cansancio de nuestras actividades previas estaba callendo dormida.

-Cygnus...- Susurré, ella dió un breve "Mhm".- Te amo.- Ella abrió los ojos y nos vimos fijamente.

-Yo te odio.- Soltó e hizo que mi corazón se encogiera.- Pero te amo más de lo que te odio.- Yo sonreí con alivio y ella me dio un beso.

-Entonces...¿Estoy perdonado?- Pregunté  con ilusión.

-Mmm...- Ella balbuceó con duda.- No, no del todo.- Volvió a cerrar los ojos y a recostarse en mi pecho. Gruñí y me resigné a pensar en algo para que me perdone hasta que caí dormido al igual que ella.

...

Sentí cuando ella se levantó y se empezó a vestir así que automáticamente abrí mis ojos para verla.

-¿Ya te vas?

-Si.- Respondió ella acercándose a la puerta.- Te hablo después.- Ella se despidió pero no quería que se fuera.

-Cygnus.- Volví a llamarla.- Te amo.- Repetí.

-Yo a tí.- Con eso ella volvió hacia mí y me besó, con ese cariño que hace tiempo necesité y ella me dió. Ahora si, ella se marchó, suspiré y volví a recostarme.

Narra Odile

Me dirigí a la habitación de mi futuro esposo, pero algo me detuvo, una maldita voz que conocía bien...

-Cygnus, te amo.- Era la voz de él.

-Yo a ti.- Unos pasos y un silencio me dijeron perfectamente qué pasaba allí dentro. Cuando los escuché cerca de la puerta corrí a esconderme a la vuelta de uan armadura.

De la habitación salió la maldita de Cygnus, miró a ambos lados por lo que oculté mi mirada y ella tomó su camino por el otro pasillo hacia el hangar de nuestro palacio.

Retomé mi camino recordando que pronto ella ya no sería un problema. Sonreí ante esa idea y toqué la habitación de MI Freezer...

Narra Cygnus

Para las 10:00 am ya estaba entrando a la órbita del planeta, aterrizé sobre un pastizal de color rosa y muchas montañas a su alrededor. Según el dispositivo holográfico la gema tenía que estar... ¡AH!

Sentí como el suelo se abría y yo junto con la nave caímos en un vacío, en un gran golpe y estruendo choqué con el piso y la nave se descompuso.

-Mierda.- Suspiré al ver cómo había quedado la nave.- Bueno... supongo que puedo teletrasportarme.- Intenté volar pero la gravedad del planeta apenas y me dejaba elevarme unos centímetros del piso.

Gruñí y empecé a caminar en busca de una salida, por las pocas entradas de luz del techo veía cómo se oscurecía y no tenía comunicación, mi única fuente de luz era el rastreador capáz de ver en la oscuridad y el dispositivo que tenia en la muñeca, pero prefería no usarlo ya que no tengo donde cargarlo.

Me sentía cansada ya que ya era de noche, entonces ruve que parar en uan esquina de la cueva para dormir, por suerte este planeta no tenía seres vivos.

Espero llegar antes de la coronación, de eso dependen muchas cosas...