Red & Red (Freezer y Tu)

(5)

|SLOW DOWN|

Estás hundida en la almohada,eres muy ruidosa,

Pero estoy a punto de enseñarte nena, Cálmate.

-Chase Atlantic

Narrador Omnisciente.

-¿Esto es lo que hace con sus soldados?- Preguntó la chica mientras el chanlong la rodeaba examinándola.

-Para nada.- Aseguró para después darle un latigazo en el trasero a la chica que resonó en la habitación.

-¿Por qué lo hace?- Se atrevió a preguntar, otro golpe la hizo soltar un gemido.

-Acaso esta cuestionando mi autoridad,Cygnus.- Se detuvo frente la pelinegra.

-Si.-Contesto si rodeos.-Esto no es...- Con un golpe más fuerte de lo normal hizo caer a la mujer de rodillas frente a él.

-No te estoy obligando.- Aseguró para enredar en cabello de su soldado al mando en una de sus manos.- Pensé que estaba resignada.

-Lo estoy, además no se qué pueda hacerme si me niego.- El tirano soltó una carcajada.

-Eres muy inteligente.- De su entrepierna emergió un miembro bañado en una cantidad considerable de fluidos.- Demasiado para tu propio bien.

Narra Cygnus

Él arrimó su miembro a mi cara, ya sabía qué debía hacer, lo tomé en mi boca y al ser tan grande tuve que masajear la parte que sobraba con mis manos.

Mi lengua iba en círculos sobre la cabeza de su polla y mis labios succionaban lo que podían. En un ataque de impaciencia, él tomó mi cabeza con ambas manos obligándome a tomarlo todo dentro de mi boca, pronto las ganas de vomitar se hicieron presentes al tener su miembro tan dentro de mi garganta.

Su ritmo era rápido y devastador para mí, de mis comisuras escurría saliva mezclada con líquido preseminal que caía en mis senos, él emitía unos gemido y gruñidos ante la sensación, cuando estuvo por correrse empujó mi cabeza, su semen cayó gran parte en mi rostro y se deslizó hasta caer junto con la mezcla que salía de mi boca.

Estaba, literalmente bañada por sus fluidos, mi cabello desorgamizado y las mejillas rojas, su sonrisa se intensificó al verme tan destruída.

-Sube a la cama.- Me ordenó, justo lo iba a hacer, cuando el me tomó del cabello hasta que me soltó bruscamente sobre la cama aproyada en cuatro; acarició mis nalgas para después abrirlas, se tomaba su tiempo ,y, para mi desgracia yo estaba completamente mojada, no lo podía ver, pero sabía que su sonrisa era enorme.

Sentí la cabeza de su pene en mi entrada, no podía mentir, era bastante grande y tenía miedo de que él forzara mi canal para que entrara todo. Cuando empezó a meterlo, con más cuidado del que pensé mi hipótesis había sido confirmada, no toda su polla cabía, poco le importó y empezó a dar estocadas duras que me hacían gritar de dolor y... placer al el forzar mi entrada de esa manera tan bruca, mis paredes se ampliaron a su gusto y cuando me acostumbré, estas se ajustaron a su forma volviendo todo más placentero.

-Para haber sido una puta.-Comentó.- Estas muy estrecha.- Dijo esto con fascinación y en cierta parte dificultad, yo solo podía gemir escandalozamente, él siguió con sus estocadas frenéticas hasta que me corrí, a el le importó menos que poco y siguió sobreestimulándome, para cuando él derramó sus semen en mi espalda yo ya tenía lágrimas decorando mi rostro por la actividad anterior.

Me recosté en la cama, bastante cansada, Freezer también estaba agitado por la actividad previa pero para mi sorpresa, él con ayuda de una toalla mojada limpio mi rostro y mi cuerpo, nos acomodó bajo las cobijas y por órdenes de él, me acosté en su pecho para "trasmitirle calor".

Durante todo este proceso estaba MUY adormilada, ya que tener sexo con Freezer no era fácil, era tanta su resistencia que en dos horas, se suponía que la pelinegra tenía que estar de nuevo al lado del tirano como su mano derecha...

Narrador omniciente

Unas horas después, la primera en despertarse fue Cygnus, se estiró y sintió dolor en todo su cuerpo, por este movimiento, el chanlong también despertó.

-Buenos días, soldado Cygnus.- Saludó con cierta gracias ante la cara de perdida de la mujer.

-Bue...- La chica paró de hablar, al ver que su garganta no respontía y su voz se escuchaba muy baja y ronca. El tirano soltó una carcajada.-¡DE QUÉ SE RÍE!- Habló lo más fuerte que pudo y claramente no fue mucho.- Esto es por su culpa.- Le tiró una almohada en la cara a Freezer a quién poco le importó y sigió riendo.

-¿Qué quieres para tu... problema vocal?- Preguntó con burla al ver la expresión de enfado de la mutante.

-Sangre.- Respondió breve y su superior asintió al conocer la situación de la chica.

Por un intercomunicador, habló a sus sirvientes pidiendo dos desayunos, uno para él con comida que la chica no logró distinguir y otro para ella: Pancakes acompañados de chocolate, frutos rojos y sangre.

Cuando llegó la comida, la chica tuvo en hudirse bajo las cobijas para que no la reconocieran, aunque el tirano le habia dicho que no era necesario.

-¿Qué es eso?- Se atrevió a preguntar Cygnus.

- Un platillo de mi planeta.- Respondió breve.- Tiene una cantidad exagerada de sodio que no cualquiera puede soportar.- Le ofreció una porción a la chica que ante el sabor no pudo tragarlo.

-¡Qué asco!- Exclamó, para este punto, gracias a su poder regenerativo con la sangre, reparó su garganta y podía hablar con normalidad.- Esto si es delicioso.- Señaló su plato y le dió de probar al Chanlong que reaccionó con una mueca de desagrado.

-Detesto las cosas dulces.- Admitió por lo que dió paso a una discucióm sobre comida innecesaria pero en la que ambos disfrutaron (irómicamente) de la compañía del otro...

-Creo que hace ocho horas tuvimos que estar en nuestros puestos de trabajo.- Dijo la de ojos oscuros saliendo del baño con el cabello mojado y ya vestida.

-Supongo que... por situaciones fuera de nuestras manos nos tuvimos que ausentar.- Respondió juguetón el chanlong.

-Supongo que si su alteza lo dice, esta bien.- Salieron de la habitación y allí estaban Zarbón y Dodoria a punto de tocar la puerta, ambos quedaron impactados al ver a su superior y a Cygnus saliendo de la misma habitación.