Familia. | [Jasper Hale y Emmett Cullen]

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El sonido de las ramas que crujen bajo sus pies es lo único que escucha a su paso. Sus dos compañeros son absolutamente silenciosos pero su presencia es como un bálsamo calmante para la inquietud de Diana.

-¿Cómo lo lleva Bella? –quiere saber cuando frena su marcha entre los árboles. Ya han puesto suficiente distancia entre el resto y ellos para hablar con tranquilidad de que nadie los escucha.

-Mejor de lo que se puede esperar. -responde Jasper.- Es bastante buena en esto de ser neófita. Me hace sentir un inútil fuera de control.

La sonrisa torcida que le dedica a la chica no la engaña. Sabe que Jasper se ha sentido un poco frustrado desde que Bella se convirtió en vampiro y sorprendió a todos con su gran autocontrol. Para él, ser neófito es sinónimo de ser salvaje y, dado que había estado rodeado de tantos durante años, lo había relacionado con su propia falta de autocontrol en algunas ocasiones.

Di apoya la mano sobre su mejilla, piel cálida contra piel fría y clava la mirada en esos ojos dorados que tanto ama.

-No eres un inútil y mucho menos estás fuera de control. Simplemente tu don te pone las cosas más complicadas a veces.

-Y otras nos viene bien. –apoya Emmett, el cual tiene su hombro contra uno de los árboles. Toda su postura demuestra calma, como si no estuvieran a minutos de distancia de luchar contra todo un ejército de neófitos. –Si expandes el miedo por todo esos vampiros lo tendremos chupado. Ni siquiera tendré que esforzarme demasiado para destrozarlos.

-¿Ves? Trabajo en equipo. –el tono de Di es forzadamente optimista. No es que no confíe en sus vampiros o en el resto de la familia, lo hace con su propia vida. Pero es el mero hecho de verlos en peligro lo que le hace estar inquieta. –Podré lanzarme sobre ellos sin problema.

-¿Estás segura de que...-ante la mirada fulminante que le da la chica, Jasper suspira y gira el rostro sólo para depositar un suave beso en su palma. –No me gusta que te pongas en peligro.

-Y tenemos al resto de lobos. –argumenta Emmett.

Diana da un paso hacia atrás para poder mirar a ambos con las manos colocadas en las caderas y el ceño ligeramente fruncido.

-Ya hemos hablado de esto.

-Nosotros expusimos nuestros argumentos y tú te opusiste. –le recuerda Jasper.

-Técnicamente eso no es hablar.

Ante la mirada asesina de Di, ahora dirigida a Emmett por sus palabras, éste alza las manos en son de paz.

-Lucharé con vosotros y con el resto, sois mi familia y pienso defenderos.

Antes de que ninguno pueda decir nada la voz de Alice llega desde algún punto a su derecha. No la puede ver pero sus palabras llegan con claridad.