Una segunda oportunidad

8

Una noche tranquila, Rosé se encontraba en el hogar de Lisa, leyendole un cuento a Luca, Lisa llegó a la casa, y al entrar en la habitación, se detuvo en seco. La escena ante sus ojos era irresistible.

Lisa sintio que algo cambió en ese instante. Un impulso inesperado la invadió, y sin poder controlarlo, se sintió atraída hacia Rosé.

Lisa se acercó sigilosamente, para no despertar a Luca. Rosé, absorta en su momento de tranquilidad, no se percató de la presencia de Lisa hasta que esta le quito al niño para acomodarlo en su cama.

Ninguna de las dos sabía qué significaba ese momento cuando sus ojos se encontraron, pero ambas sintieron que algo había cambiado irreversiblemente entre ellas. Sus labios chocaron, sin movimiento alguno.

Roseanne se separo de Lisa en el momento que sintió lágrimas caer mojando los labios de las dos, abrazando fuertemente a la castaña quien lloraba en su hombro.

-Lo siento, yo me deje llevar, discúlpame.

Roseanne se sintió triste ante el comentario de Lisa, pues esta había desarrollado amor por la castaña.

-No te preocupes Liss, te quiero! Ten una linda noche.

La rubia salió del departamento dejando a una Lisa devastada, esta se tiro en su cama pidiendo perdón a su ex esposa.

-Lo siento Jennie lo siento!.

Al día siguiente platicaba a Jisoo lo ocurrido.

-Lisa, Jennie quisiera que fueras feliz.

-siento que la estoy traicionando.

-No, estas buscando a alguien que se ha estado ganando tu corazón y que ama a Luca. Rosé ha respetado mucho tu duelo.

-aun extraño a Jennie, pero Rosé me gusta!

-y siempre amaras a Jennie, eso no significa que hagas mal, pero el amor de Jennie es algo que no tendrás de vuelta, date la oportunidad de amar y ser amada.

- talvez en estos días la busque, no quize dejarle hoy a Luca.

-eres una inmadura, te vas a quedar sola y por miedo a amar le estas negando a Luca a alguien que lo adora como si fuese propio.

-Tienes razón, debo hablar con Rosé, lo haré cuando llegue.

-así se habla campeona.

Lisa llegaba al edificio, buscando sus llaves, el elevador estaba tardando demasiado y decidió ir por las escaleras, total, 3 pisos no eran mucho, al subir al 2do. piso escucho una voz bastante conocida.

-Anda vamos, se ve que será una buena fiesta.

-me encantaria ir pero no puedo, tengo trabajo.

La mirada de Lisa se cruzaba con la de Roseanne y un chico que al parecer era del edificio de frente.

-Buenas noches -saludaba la castaña para seguirse al siguiente piso.

Mientras subia, el corazón de Lisa sentía partirse en mil pedazos. Pero se aguanto las lágrimas hasta que abrió su puerta. Dejo a su bebé en la cama quien se encontraba dormido. Bastaron 5 minutos para qué sonará su timbre.

Pero Lisa no quizo abrir.

La rubia no lo pensó dos veces y abrió con la llave que ella tenía.

-Lisa?

La castaña se limpio las lágrimas- Que pasa Rosé?

-perdón por entrar así, llame pero no atendiste y me preocupe.

-llegue muy cansada estaba quedandome dormida.

-entiendo, a que hora vengo mañana? Extrañe mucho a Luca hoy.

-ya no quiero que lo cuides.- contestaba cortante la castaña

-Pero porque?

-porque no y punto, pienso meterlo a una guardería.

- no voy a permitir que hagas eso, el esta muy bien cuidado por mi o hice algo mal?

-Rosé, sal! diviértete, no te ates a esto, nisiquiera es un empleo. Así que te quito esta responsabilidad.

La rubia extrañada por el comportamiento de Lisa comenzaba a sentir como se le rompía el corazón por la forma de hablarle.

-a mi me encanta cuidar a Luca. No se que hice mal para que me niegues cuidarlo.

-Lárgate Rosé!

-que demonios te hice Lisa?

-que que me hiciste? Entrar en mi corazón te parece poco? Haber respondido a mi beso y encontrarte con ese chico bobo, que me hizo sentir que estoy robándote tu vida por cuidar a mi hijo.

-si cuido a tu hijo es porque lo adoro, acaso eres tan estúpida para no darte cuenta que te amo?

Lisa se paraba frente a la rubia, -pues no parece estabas sonriendole a ese idiota.

-estaba siendo amable, pero eres tan imbecil que en vez de decirme que sientes algo por mi, prefieres tratarme mal, porque eres una miedosa.

Rosé estaba dando la media vuelta para retirarse cuando fue detenida por Lisa quien le dio un beso muy diferente al anterior. Este era húmedo, largo , y mientras más duraba, Lisa se aferraba a la cintura de la rubia.

Al momento de terminar con ese beso, se miraron a los ojos sonriendo.

-tienes razón soy una imbecil, no se porque no quería darme cuenta que siento algo por ti., es solo que sigo sintiendo que todo es muy reciente.

-Lisa yo jamás voy a querer ocupar el lugar de Jennie, al contrario, estoy muy agradecida con ella por haberlas puesto en mi camino; yo te amo y amo a Luca, no pretendo sustituir a su madre pero sin duda alguna no me puedes quitar todo el cariño y amor que siento por el.

-Lo sé Rosé, me gustas eso no lo pienso negar y poco a poco me fui encariñando más contigo, quiero estar a tu lado pero te pido paciencia porfavor.

-iremos Lento Liss, iremos a tu ritmo he podido aguantar tanto que ya nisiquiera recuerdo en que momento me enamore de ti.

Lisa sonreia, es verdad Luca a penas si tenia su año y meses y ahora va a cumplir 3.

-te dejo descansar, vengo mañana temprano. -Rosé daba un beso en la frente de Lisa. Pero esta la detenía.

-quédate, al menos esta noche.

-de acuerdo, voy por pijama! No tardo.

Esa noche Lisa durmió bajo el abrazo de alguien que la hizo sentir nuevamente amada, el suave tacto de la rubia y el rico olor que desprendia su perfume, hizo sentir a la castaña feliz.

Las dos se consumieron en sus profundos sueños.