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El bullicio llenaba por completo el salón de baile mientras los nobles se regodeban entre si de sus riquezas, la familia real como dicta el protocolo se encontraba completa en el lugar involucrandose con los nobles o en su defecto hablando entre si.
La música sonaba mientras las parejas bailaban y todos esperaban impacientes la llegada del príncipe mayor, múltiples rumores circulaban en la alta sociedad, desde posibles amantes hasta enfermedades terminales.
-¡ANTE USTEDES EL PRINCIPE MAYOR, COMANDANTE EN JEFE DE LAS TROPAS IMPERIALES, KENETH AZAEL RENARD RAME SECRAMISE, HEREDERO LEGITIMO DE ARBEZELA Y RAME, NUESTRO HONORABLE HÉROE DE GUERRA!
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El silencio se instaló en el salón al ritmo en que las trompetas sonaban dándole la bienvenida, la puerta se abrió y Keneth entró orgulloso e imponente, todos los presentes se inclinaron ante el en perfecta sincronía, cuando llegó frente a la familia real se giro a la nobleza.
-Pueden levantarse.
Todos retomaron su postura y volvieron a lo suyo sin despegar los ojos del príncipe, quien saludaba a su familia con alegría siendo recibido por sus entusiastas sobrinos, hablo con ellos escuchando sus anécdotas y bailando con todos los príncipes, el tabú de dos personas del mismo genero bailando o estando juntos se rompió con el, en dado momento se acercó a madam Marigold y le pidió un baile.
Se colocaron en el centró y comenzó a sonar una melodía que ambos reconocieron, era la canción preferida de ambos así que con una enorme sonrisa comenzaron a moverse con gracia por todo el salón, se complementaban tan bien que verlos a ambos girar era como ver una obra de arte, Kenteh giraba escuchandola reír, ella sabía que le encantaba presumirla durante la danza, bailaron tres canciones y se despidieron con la promesa de fugarse esa misma noche a celebrar en el pueblo como en antaño.
Keneth se acercó a la mesa de bocadillos y comenzó a hablar con los nobles, rápidamente fue rodeado por una multitud donde todos trataban de negociar con el, coquetear o ganarse su favor, desde muy joven supo ganarse a las personas pero eso no significa que le agraden, siempre a preferido celebrar con el pueblo, solía escaparse del castillo y disfrutar los festivales, fue justo así que conoció a su querida Marigold.
