Ayanokouji en oregairu

Capitulo 10: Campamento en chiba

Ayanokouji se despertó temprano como de costumbre, listo para iniciar su rutina diaria de ejercicios. Después de una serie de estiramientos y ejercicios de resistencia, se dirigió al baño, donde una ducha fría lo revitalizó para el día. Mientras se secaba el cabello, su teléfono vibró en la mesa. Al desbloquearlo, vio un mensaje..

-Soy tu profesora Hiratsuka. Hoy iremos de campamento a Chiba. Ven a la escuela a las 8:00 a.m. -decía el mensaje.

Ayanokouji leyó el texto y dejó el teléfono a un lado, cambiándose de ropa. Se puso algo más adecuado para el campo: una camiseta ligera, pantalones cómodos y una chaqueta. Preparó una pequeña mochila con lo esencial y salió de su departamento rumbo a la escuela.

Cuando llegó, la profesora Hiratsuka ya estaba allí, junto con Yui y Yukino. Yui lo saludó con su característico entusiasmo.

-¡Yahallo, Ayanon! -dijo Yui con una sonrisa radiante.

Ayanokouji simplemente asintió, mientras Yukino lo saludaba con una inclinación de cabeza más formal.

-Buenos días, Ayanokouji-kun -dijo Yukino, con su tono siempre calmado.

Minutos después, Hikigaya apareció en el estacionamiento, acompañado de una chica más joven que resultó ser su hermana.

-¡Hola a todos! Soy Komachi, la hermana de Hachiman -se presentó la chica con una gran sonrisa.

-Yahallo -añadió, imitando el saludo de Yui.

Hikigaya, como de costumbre, parecía poco entusiasta, pero no dijo nada al respecto. A los pocos segundos, otro chico apareció corriendo. Era Saika Totsuka, quien rápidamente saludó a Hikigaya.

-¡Hachiman! -dijo Saika con entusiasmo antes de girarse hacia el grupo y saludar a todos con una sonrisa.

Con todos presentes, subieron al auto asignado. Ayanokouji se sentó en silencio, observando mientras Yui hablaba con entusiasmo sobre lo divertido que sería el campamento.

-Va a ser muy divertido, ¿no crees, Ayanon? -le preguntó Yui mientras mantenían una conversación ligera.

-Supongo que sí -respondió Ayanokouji, aunque su interés en el evento era mínimo.

Después de un par de horas en la carretera, finalmente llegaron al campamento en Chiba. Bajaron del auto uno por uno, estirando las piernas tras el largo viaje. Ayanokouji observó el entorno. El campamento estaba ubicado cerca de un bosque, con varias cabañas y áreas recreativas para los niños.

Minutos después, un segundo auto llegó al lugar, y de allí salieron Hayato y su grupo de amigos. Hikigaya los observó con el ceño fruncido.

-¿Qué hacen ustedes aquí? -preguntó Hikigaya, claramente desconcertado por su presencia.

-Durante unos días vamos a trabajar como voluntarios, como parte de las actividades del club de ayuda -explicó la profesora Hiratsuka, respondiendo antes de que Hayato pudiera hablar.

Luego, la profesora explicó la tarea que les esperaba.

-El objetivo de este campamento es ayudar a los niños a socializar y disfrutar del tiempo en la naturaleza. Su tarea como miembros del club de servicio voluntario será asistir a los coordinadores del campamento y trabajar con los niños. Verán que no todos los niños son iguales, y en particular hay una niña que está aislada del resto. Quiero que intenten ayudarla a integrarse.

Mientras Hiratsuka hablaba, Ayanokouji observaba a su alrededor. Algunos niños ya estaban corriendo y jugando, pero tal como dijo Hiratsuka, una niña estaba sola en un rincón, sentada sobre una roca, mirando al suelo. Su presencia llamó su atención, pero decidió no intervenir de inmediato.