«Cap 14»

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«────── « ⋅ʚ♡ɞ⋅ » ──────»

Milo después de despedirse de una manera un tanto cariñosa y particular de su amigo, se despidió una última vez de él, haciéndole una seña con la mano, para momentos después subirse al auto de su papá

Écarlate, quien obviamente observó todo desde la ventana, no pudo evitar activar sus celos de papá, clásico de Écarlate. Él se molestó un poco al ver a su pequeño angelito dándole un beso en la mejilla a alguien que no fuera él. Así que cuando ambos niños subieron al auto, comenzó a interrogar a Milo

Écarlate: Milo, necesito tener una charla seria contigo... ─ dijo en un tono firme, lo cual dejó un poco incrédulo al peli azul

Milo: ¿Qué sucede, papi?, ¿hice algo malo? ─ le preguntó algo confundido e inocente. Milo no recordaba haberse portado mal últimamente

Écarlate: Necesito saber... ─ hizo una pequeña pausa ─ ¿a qué vino ese "beso" en la mejilla entre tú y tu "amiguito"? ─ preguntó seriamente

Aiacos: Oh no, Chernóbil prendió sus celos... ─ dijo en tono sarcástico, sacándole una pequeña risita a su hermano

Écarlate: Aiacos, te he dicho que no te metas en conversaciones ajenas, y réspetame que soy tu padre. En cuanto a tí, Milo, responde mi pregunta ─ dijo en un tono más firme mientras conducía


Milo unos momentos antes de responderle la pregunta a su padre, Aiacos y él se miraron por unos instantes, intentando aguantar la risa. Porque la verdad, ellos ya estaban acostumbrados a esas actitudes de su padre, y les causaba algo de gracia verlo así

Milo: Bueno, no creo que tengas que preocuparte por eso, papá, simplemente somos amigos y ya. Supongo que es normal despedirse así, ¿no? ─ responde, tratando de aguantar una pequeña risita

Écarlate: No lo creo, hubiera sido mejor que te hubieras despedido de él con un simple gesto de mano, y nada más ─ le reprochó mientras seguía conduciendo

Mientras Milo y Écarlate tenían su "charla seria", Aiacos por su parte estaba algo distraído mientras miraba por la ventana; puesto que desde en lo que siguió de la tarde después del recreo, no había podido quitarse de la cabeza aquella declaración de Minos

Después de algunos minutos, el interrogatorio de Écarlate hacia Milo por fin acabó, así que la tensión bajó un poco

Écarlate: Muy bien. ¿Qué tal les fue hoy? ─ les preguntó, tratando de quebrar aquel incómodo silencio

Milo: A mí me fue muy bien, hoy conocí a un amigo nuevo ─ respondió con tono animado ─ pero a mi hermano no lo ví en todo el recreo. ¿En dónde estuviste, Aiacos?

Aiacos: ¿Eh...? ─ preguntó unos momentos después ─ oh, yo... Estaba en el otro patio... Normal... ─ respondió algo distraído, sin dejar de mirar a la ventana

Milo y Écarlate se dieron una mirada sospechosa, normalmente Aiacos no solía comportarse de esa manera tan... Extraña. Pero no dijeron nada, y supusieron que quizá sólo pasó eso, dejando su incómoda charla hasta que finalmente llegaron a casa

Al llegar, Écarlate estacionó el auto, mientras los niños se bajaban, para ir directamente hacia la entrada de su casa, en donde ya los estaba esperando su madre

~Mientras tanto...~

Dégel y Camus también estaban llegando a su casa, ellos tardaron un poco más debido a que fueron caminando, y normalmente no suelen hacerlo con prisa. Dégel sacó sus llaves y abrió lentamente la puerta, mientras ambos entraron y la cerraron nuevamente

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⏰ Última actualización: Nov 06 ⏰

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𝑈𝑛 𝑎𝑚𝑜𝑟 𝒊𝒎𝒑𝒐𝒔𝒊𝒃𝒍𝒆 (Camus & Milo) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora